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La Selección de Islandia es una de las notas más llamativas de esta Eliminatoria a Rusia 2018. Sus poco más de 338.000 habitantes sirvieron para dejar una marca como el país con menor población que se clasifica a un Mundial.
Uno de los artífices de esta gran gesta, es el entrenador Heimir Hallgrímsson, a quien años atrás, muchos conocían no más dentro del consultorio.
El DT que hoy es ídolo nacional, en realidad trabaja como odontólogo, y asegura que se comporta en su espacio, igual que en el camerino con los futbolistas: “Mucha gente tiene miedo de ir al dentista, pero tienes que buscar la mejor forma de hablarles. Tienes que relajar a uno, ser divertido con otro, serio con el tercero, pero rápido para adaptarte a cada personalidad. Ejerces de psicólogo antes que de odontólogo. Hago lo mismo con los futbolistas”.
Y aunque desde el año 1993 comenzó su carrera como estratega en la Selección femenina, nunca abandonó su profesión. Claro está, por cuestiones de tiempo debe priorizar para enfocarse de lleno en el combinado patrio.
Hallgrímsson, quien también jugó fútbol, convive además como un simple ciudadano. Entre sus actividades más comunes, está la de visitar los bares más concurridos para compartir con los aficionados: “Sé que le parecerá estúpido a la gente de otros países que el seleccionador nacional vaya al pub a hacer esto antes de partidos importantes. Pero creo que es algo que nos hace diferentes y que ha reforzado la conexión entre aficionados y equipo”.

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