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Resumen: Doña Diana Hernández, la madre de Ángel Di María, fue una pieza clave en los inicios de su carrera, pedaleando 9 kilómetros diarios en su bicicleta "Gabriela" para llevarlo a los entrenamientos de Rosario Central a pesar de la escasez de recursos. Este sacrificio incondicional impulsó a Di María a una exitosa carrera en Europa, y ahora, tras superar obstáculos, regresa al club de sus orígenes para culminar su trayectoria, generando gran expectación en el fútbol argentino.
Doña Diana Hernández recoge hoy por hoy los frutos de creer en su hijo, del sacrificio y de apoyarlo a pesar de la adversidad, esta es la hermosa historia de los inicios de Ángel Di María.
La mamá del campeón del mundo con la Selección Argentina, si bien ya era muy conocida, la tierna dedicatoria de Di María en las redes sociales, la catapultó aún más.
Y es que no es un simple mensaje, es el recuerdo de un grande del fútbol que no solo tuvo la fortuna de nacer en un país con mística futbolera sino además en un hogar donde tendría su mejor motivadora.
Todas las mañanas, en una bicicleta paletera, doña Diana llevaba a Angelito a los entrenamientos, la imagen vale oro en la mente del jugador argentino.
En aquella época un pero surgió en el camino del ‘fideo’ para entrenar con Rosario Central. 9 kilómetros los separaban del lugar de entrenamiento.
El padre de Di María vio una complicación “no tenemos carro, ¿cómo lo llevamos?”, una pregunta que encontró respuesta de inmediato.
“Gabriela” se convirtió en la solución. No era una señora, era una bicicleta amarilla, una paletera como le dicen en Antioquia.
La mamá de Angelito no tuvo problema en cogerla, montar a su hijo y llevarlo, diariamente, a los entrenamientos.
El sacrificio, 18 años después, muestra cuánto valió la pena. Di María la rompió en Europa, ganó de todo y ahora regresa al equipo que lo vio iniciar.
Sin duda, será uno de los mejores cierres en la carrera deportiva de un futbolista profesional que el mundo podrá ver.
Di María, quien viene de una destacada temporada con el Benfica de Portugal, se unirá al plantel “auriazul” una vez finalice su participación en el Mundial de Clubes.
Ese torneo, como se recordará, se disputará en Estados Unidos del 15 de junio al 13 de julio.
Esto significa que los hinchas de Central deberán esperar un poco más para ver a su ídolo nuevamente con la camiseta que lo vio nacer.
Cabe recordar que el intento de regreso de Di María a Rosario Central el año pasado se vio frustrado por lamentables amenazas contra él y su familia.
Afortunadamente, en esta ocasión, ese oscuro capítulo quedó atrás y el sueño de verlo nuevamente en el Gigante de Arroyito se materializó, desatando la euforia en la ciudad y en el fútbol argentino.
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