Pelé se casó en tres oportunidades y le dio el apellido a siete hijos. La vida personal del ídolo brasileño, sin ser tan accidentada como la de su eterno rival, Diego Armando Maradona, fue bastante complicada.
El astro dejó de reconocer a una hija. Se trata de Sandra Machado, quien nació en 1964 tras un romance de ‘O Rei’ con una empleada. Luego de una lucha legal de cinco años, los tribunales fallaron a favor de la mujer en 1996, esta contó su historia en el libro “La niña que el rey no quiso”, antes de morir a causa de un cáncer de mama a los 42 años en el 2006.
Para el año 2013, los hijos de Sandra, Gabriel y Octavio, menores de edad en ese momento, denunciaron al exitoso exfutbolista por haberlos “abandonado intelectual, moral y materialmente”.
Por estos días, con la muerte de Pelé, ambos se han pronunciado. Y lo realizaron para hablar de la conversación en el hospital en la que perdonaron a su abuelo.
En diálogo con Luiz Felipe Castro, reportero de la revista ‘Veja’, Gabriel, quien estudia periodismo, reveló que se encontraban en Estados Unidos cuando se empezó a deteriorar la salud del brasileño.
Según contó, regresaron a Brasil por petición del padre de su madre.
“Regresamos con prontitud y charlamos…, le conté todo de cuánto lo admiraba como jugador, como persona…, me quedé con mi mano entrelazada con la de él orando, hablando. Fue un momento muy triste, pero muy importante para mí y para mi hermano”, expresó Gabriel.
Al hablar del desenlace del momento, Octavio, su hermano, dijo que pudieron perdonar a su abuelo, por lo sucedido en el pasado.
“Fue un momento difícil en el hospital. Creo que logramos perdonarlo de verdad, ese es el legado que tiene que ser dejado. El perdón y el amor conquistan todas las cosas”, concluyó Octavio.
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