¡En la casa y frente a sus tres hijos! Asesinaron a la lideresa Angie Leandra

Minuto30.com .- Una nueva y desgarradora noticia enluta al departamento del Cauca. Angie Leandra Henao Zambrano, reconocida lideresa veredal e integrante de la Asociación Nacional de Usuarios Campesinos (ANUC) Norte del Cauca, fue asesinada a sangre fría la tarde de este viernes 27 de junio de 2025. Con su muerte, asciende a 79 el número de líderes y defensores de Derechos Humanos asesinados en Colombia en lo que va de 2025, según el lamentable registro de Indepaz.

El crimen, que ha generado profunda indignación, ocurrió aproximadamente a las 2:30 p.m. en la vivienda de Angie Leandra, ubicada en la vereda El Silencio, zona rural del municipio de Corinto. La ANUC Norte del Cauca denunció que hombres fuertemente armados y sin identificar irrumpieron en la residencia mientras la lideresa se encontraba acompañada de sus tres hijos, disparándole en repetidas ocasiones y causándole la muerte en el instante. Angie Leandra era madre cabeza de familia y una figura muy valorada en su comunidad.

Este atroz asesinato se da en un contexto de alto riesgo para la región. La Defensoría del Pueblo ya había emitido la Alerta Temprana 019/24, advirtiendo sobre el escenario de riesgo inminente en Corinto. Esta alerta se fundamentaba en varios hechos de violencia recientes, derivados del ingreso del Frente 57 “Yair Bermúdez”, cuya llegada se anunció desde marzo de 2024 para confrontar al Frente Dagoberto Ramos, facción disidente de las antiguas FARC-EP.

La zona de Corinto es un punto de disputa territorial entre varios grupos armados ilegales, incluyendo el Frente Dagoberto Ramos del Bloque Occidental del EMC, el Frente 57 “Yair Bermúdez” y otras bandas de carácter local. Esta compleja situación de violencia armada, que involucra a la Jurisdicción de la Tercera División del Ejército Colombiano, expone la vulnerabilidad de los líderes sociales y las comunidades campesinas.

El asesinato de Angie Leandra Henao Zambrano es un llamado urgente a las autoridades nacionales y locales para que refuercen las medidas de protección a los líderes sociales y garanticen la seguridad en territorios asediados por el conflicto. Su muerte no solo representa una pérdida irreparable para su familia y su comunidad, sino también un duro golpe para el tejido social y la defensa de los derechos humanos en el país.