La Alcaldía de Medellín presentó los resultados de dos investigaciones con las que se buscaba evaluar los efectos de las acciones del programa Buen Comienzo en los niños que son atendidos en sus sedes.
Se adelantaron dos investigaciones. La primera fue hecha por la Universidad de Antioquia con recursos de la Administración Municipal y tuvo una muestra de más de 28.000 beneficiarios de diferentes modalidades del programa. Se realizó en los componentes Educación Inicial, Desarrollo Infantil y Estado Nutricional.
“Queda demostrado que un niño que pase por Buen Comienzo tiene mayores capacidades cognitivas, mejor nutrición, mejor talla, además de mayores posibilidades en su desempeño académico y de tener más oportunidades en la vida, y así lo ha demostrado el estudio a lo largo de estos años”, dijo el alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez Zuluaga.
Uno de los principales hallazgos se dio en el componente de Estado Nutricional en el cual se encontró que Buen Comienzo tiene efectos positivos en los participantes, ya que estos presentan una mejor talla y menores porcentajes de exceso de peso al compararlos con encuestas nacionales y locales. Esto indica que los esfuerzos realizados para el suministro de alimentos de calidad y la educación nutricional influyen significativamente en el desarrollo físico de los niños atendidos.
En Educación Inicial se determinó que a mayor tiempo de exposición de los niños y familias al programa son mejores las valoraciones de las familias en cuanto a la calidad de la educación.
También se concluyó que se debe continuar fortaleciendo el trabajo con los hogares y que, aunque se cumple con calidad en Educación Inicial, hay procesos que se pueden mejorar en la atención integral.
En Desarrollo Infantil hay fortalezas, puntualmente en la promoción de habilidades en las áreas personal, social y de adaptación al desarrollo, ya que facilita la interacción con adultos y compañeros de la misma edad y favorece la construcción de roles y el autoconcepto. Además, permite la independencia de los niños en actividades cotidianas.
La evaluación hecha por el Banco de la República encontró que hay efectos positivos entre la población que asiste a Buen Comienzo con relación a una mayor probabilidad de continuar en el sistema educativo y un mayor rendimiento en las pruebas Saber del grado quinto; también que hay una menor probabilidad de deserción y de tener un embarazo en la adolescencia.
Buen Comienzo lleva más de 14 años acompañando a las familias de Medellín. Hoy cuenta con 426 sedes y la tasa de cobertura más alta que haya tenido, al pasar en 2015 de un 69 % a un nivel histórico de 80 % en 2018, lo que representa más de 80.000 niños atendidos.
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