Con avances en movilidad, tecnología, infraestructura y proyección de futuro, el Área Metropolitana del Valle de Aburrá superó las expectativas en 2020.

Una gestión muy positiva y de gran impacto para la calidad de vida de los ciudadanos, tuvo el Área Metropolitana del Valle de Aburrá en en 2020. Desde el inicio del año, la entidad empezó con pie derecho tras la aprobación de su Plan de Gestión Futuro Sostenible, 2020 – 2023, por unanimidad y en la primera presentación a la Junta Metropolitana.

Adicionalmente, el Área Metropolitana del Valle de Aburrá enfrentó grandes retos con una gestión que superó las expectativas y posicionó a su director, Juan David Palacio y a la entidad como líderes de las decisiones más importantes en torno al progreso del Valle de Aburrá, especialmente, las relacionadas con las medidas para enfrentar los desafíos del Covid 19 garantizando la salud y calidad de vida de los ciudadanos.

Dentro de los hitos del balance del Área Metropolitana en este 2020 se destaca que bastaron tres meses para que la entidad lograra darle vida a la construcción del Metro Ligero de la 80, mediante los ejercicios de modelación requeridos para certificar ante el Gobierno Nacional la viabilidad técnica y financiera, una labor esperada por todos hace más de 15 años.

Adicionalmente, la entidad se convirtió en la primera Área Metropolitana del país en tener la competencia como gestora catastral, otorgada por el IGAC, que iniciará en cuatro municipios del norte del Valle de Aburrá: Barbosa, Girardota, Copacabana y Bello en enero de 2021.

También es de destacar que la Junta Metropolitana aprobó el Valle del Software, como nuevo Hecho Metropolitano, lo que permitirá plantear políticas públicas en torno a la tecnología y la aplicación de las herramientas que da la Cuarta Revolución Industrial (CRI) para hacer la vida más fácil, y con mayor calidad para los habitantes metropolitanos.

De igual manera, y no menos importante en 2020 el Área Metropolitana del Valle de Aburrá entregó 11 nuevas estaciones de Encicla en distintos municipios del Valle de Aburrá, lo que ha permitido 1.657.349 préstamos de bicicletas y el aprovechamiento de 750 nuevos metros de ciclorruta puestos en funcionamiento entre las universidades de Antioquia y Nacional sede Medellín, en 2020.

Una ruta trazada

En un proceso realmente ágil, juicioso y responsable es de destacar la aprobación de la carta de navegación de los próximos 10 años de esta entidad, que se contempla en el Plan Integral de Desarrollo Metropolitano –PIDM- una herramienta que será vital para el desarrollo territorial entre 2021-2031, y que ya tiene el visto bueno de los diez mandatarios del Valle de Aburrá. Y no siendo poco, también se logró la aprobación del Plan Maestro de Movilidad para la región metropolitana del Valle de Aburrá por parte del Consejo Metropolitano de Transporte.

Innumerables son los logros presentados por el director del Área Metropolitana, Juan David Palacio Cardona, y su equipo directivo, que realizaron la Rendición de Cuentas este 15 de diciembre. Por estas, y muchas otras razones Naciones Unidas Habitat la nombró como una de las 8 mejores experiencias en gobernanza de áreas metropolitanas en el mundo.

El informe resalta la siembra de 200.000 árboles, de un millón que se plantará durante el cuatrienio; la inversión de $13.000 millones en el Centro de Atención y Valoración de Fauna Silvestre, que lo convertirá en referente único de América Latina, y que atendió 9.000 animales silvestres.

También se destaca en este balance los avances en la infraestructura vial. Se adelantan 31 grandes proyectos como la construcción del nuevo Centro Administrativo de Caldas, y los intercambios viales de La Ayurá, Pilsen, Induamérica, la Regional Oriental-Norte y la vía Distribuidora recién inaugurada, entre otras.

Al igual, se destaca la participación de 20.000 ciudadanos impactados con la campaña contra la pólvora Huellatón y la entrega de la Cápsula Viva Metropolitana, como un regalo de la entidad para todo el Valle de Aburrá, como parte de la conmemoración de los 40 años.

Otro de los resultados importantes, no solo para la entidad sino para toda la región, son las 58,67 toneladas de CO2 que fueron evitadas y que no lograron contaminar la atmosfera, y los 3.721,39m3 de agua ahorrada mediante un seguimiento a empresas en la gestión de producción y consumo sostenible.

De un presupuesto de 1,75 billones de pesos para esta vigencia 2020-2023, en 2020 se ejecutaron $380.000 millones en distintos proyectos de desarrollo en los municipios del Valle de Aburrá: Caldas, La Estrella, Sabaneta, Itagüí, Envigado, Medellín, Bello, Copacabana, Girardota y Barbosa.

En su ejercicio como autoridad ambiental en la zona urbana y de transporte público, metropolitano y masivo, este año el balance es muy positivo. Pero nada de esto podría ser posible sin la formulación del Plan de Gestión 2020–2023 “Futuro Sostenible”, que tiene un enfoque basado en las ciudades inteligentes a partir de la información, la innovación, la movilidad, las tecnologías y el conocimiento, y está estructurado por 27 programas y tres ejes componentes como la Sostenibilidad Ambiental, las Sinergias Territoriales y la Conectividad Física.

Fue un año especial, sui generis, distinto, dramático, atípico. De 2020 quedan aprendizajes y lecciones de vida. Pese a todas las vicisitudes que este tiempo de pandemia ha traído, nada ha sido motivo para impedir el buen desarrollo de las actividades, el cumplimiento de la misión y el qué hacer cotidiano del Área Metropolitana del Valle de Aburrá.

Porque el Futuro Sostenible no se detiene.