Cuando se construyó el Puente Colgante Golden Gate, todo un hito de la historia de la ingeniería, se convirtió en el más largo del mundo. Este fin de semana, esta construcción tan famosa ha cumplido 75 años y miles de personas han acudido a celebrarlo.
El Puente Golden Gate ha cumplido 75 años y la ciudad de San Francisco ha decidido celebrarlo por todo lo alto. Miles de personas acudieron durante el fin de semana a visitar esta maravilla de la ingeniería que cuando se construyó se convirtió en el puente colgante más lago del mundo.
La idea de levantar un puente en el estrecho Golden Gate, donde se encuentran la Bahía de San Francisco y el océano Pacífico, partió del ingeniero Joseph Strauss en la década de 1920. El diseño original de Strauss, presentado a las autoridades de la ciudad de San Francisco en 1921, era un híbrido entre puente voladizo y colgante. Pero más tarde se impuso la idea de un puente totalmente colgante.
Completado en 1937 con unos costes de “sólo” 35 millones de dólares, el Golden Gate Bridge mantuvo el récord de mayor tensión en un puente levadizo hasta 1964. Actualmente aún se encuentra en el ‘top ten’ mundial, con una longitud de tensado de 1.280 metros entre sus dos torres. Su longitud total, incluidas las rampas de subida y descenso, es de 2.737 metros.
El puente se encuentra ahora en medio de una renovación anti-sísmica por la que se han sustituido o modificado muchas de sus estructuras clave.
Por la autopista de seis carriles del Golden Gate circulan actualmente unos 120.000 vehículos al día, además de unos 10.000 peatones y hasta 6.000 ciclistas. A ellos se suman los miles de turistas que se apelotonan en los miradores a ambos lados del puente para inmortalizarlo con su cámara de fotos.
Con información de iies.es