El reciente informe de la veeduría “Medellín cómo vamos” desató una fuerte polémica en la ciudad, dados los alcances de las denuncias y el programa denunciado: “Buen Comienzo”, iniciativa que se puso en marcha desde el 2006 para prestar apoyo a niños de primera infancia y a las madres gestantes y lactantes, y que se convirtió en bandera preferencial de las administraciones de la capital antioqueña.
“Medellín cómo vamos”, que se define como “una alianza interinstitucional privada que tiene como objetivo superior hacer seguimiento y análisis a la calidad de vida en la ciudad, con una mirada metropolitana en sectores específicos” reveló que “Buen Comienzo” decayó en cifras de servicio y atención durante el 2021, además de una serie de hallazgos por parte de la Contraloría que dejarían mal parada la gestión del programa.
Al director de buen comienzo, Hugo Diaz, no le cayó bien ni el seguimiento ni el análisis realizado por “Medellín cómo vamos” a los que calificó de sesgados por motivos ideológicos, (para nadie es un secreto la serie de roces que ha mantenido la administración de Daniel Quintero con el sector privado más sobresaliente de Medellín) y criticó fuertemente la metodología utilizada por la veeduría para sacar las conclusiones entregadas a la opinión pública.
Para Hugo Diaz hay datos inexactos, períodos no correspondientes y cifras amañadas en el informe de la veeduría privada.
Desde su cuenta de Twitter, el alcalde Daniel Quintero ha respaldado la gestión de “Buen Comienzo” y se entiende como un apoyo a su director:
¿Sabían que este año Buen Comienzo aumentó el número de cupos para atender a más niños y niñas en Medellín? Nuestro director @HugoADiazMarin lo cuenta en Consejo de Gobierno, en donde además explica eso qué significa para la Primera Infancia @QuinteroCalle @AlcaldiadeMed pic.twitter.com/dZqLIuLD1a
— Buen Comienzo (@Buen_Comienzo) October 3, 2022
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