Uno de los presuntos secuestradores de Calasanz se tiró del piso 20, intentando huir de la Policía

Cortesía: Denuncia ciudadana

En la tarde del pasado domingo 3 de febrero se presentó un gran operativo en el interior de una unidad residencial en el barrio Calasanz, occidente de la ciudad de Medellín.

El operativo se llevó a cabo para rescatar a tres comerciantes que habían sido secuestrados desde el pasado viernes pimero de febrero y estarían pidiendo por su liberación un total de 350 millones de pesos.

El general Eliécer Camacho, comandante de la Policía del Valle de Aburrá, indicó para medios que uno le de los secuestrados arrojó un reloj desde el apartamento, donde había enviado un mensaje de auxilio. Una persona lo encontró y alertó a las autoridades de lo sucedido.

Las autoridades llegaron hasta el apartamento, piso 20, para comprobar la situación. Al tocar la puerta, uno de los secuestrados pidió ayuda a gritos, mientras que los presuntos secuestrados intentaron huir.

“Uno de los delincuentes se lanzó (desde el piso 20) por el shut de las basuras, tiene una lesión en un brazo y posteriormente es capturado, en el apartamento se encuentra un perro pitbull que atacó a uno de los secuestradores y fue llevado a un centro médico”, explicó el general Eliécer Camacho, comandante de la Policía del Valle de Aburrá.

De acuerdo con las autoridades el secuestro fue planeado por un comerciante, al parecer, con la intensión de cobrar una deuda, según recogió Caracol Noticias,

“Se trataría de un cobro de cuentas por comercio legal, que debían 350 millones a un comerciante y este a su vez estaba presionando para el pago”, agregó Camacho para el medio ya mencionado.
Así se dieron cuenta que habían tres secuestrados en un apartamento en Calasanz