La Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB), se encuentra realizando las respectivas investigaciones por el caso de un empleado que trabajaba como operario en el aeropuerto de San Antonio, en Texas, quien perdió la vida al ser succionado por la turbina de un avión.
“El vuelo 1111 de Delta estaba grabando la puerta, con un motor encendido en ese momento, y un trabajador fue ingerido en ese motor a las 10:25 p.m.”, dijo la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB).
El hombre trabajaba para Unifi Aviation, una empresa que presta el servicio de asistencia en tierra.
El trágico suceso se dio cuando un vuelo de la aerolínea Delta arribó el viernes a la ciudad de San Antonio, en Texas, proveniente de Los Ángeles e iba rumbo al portón de embarque con uno de los motores encendido “cuando un trabajador fue absorbido por ese motor”, explicó la NTSB en un comunicado.
Respecto a lo sucedido, voceros de esta aerolínea mencionaron a la emisora KENS 5 de San Antonio que la empresa está “cooperando con las autoridades mientras comienzan su investigación”.
Asimismo “La NTSB continúa recopilando información sobre el incidente”, indicaron las autoridades, para revelar las razones por las que sucedió este caso.
Mientras tanto, Unifi Aviation catalogó lo ocurrido como “un trágico accidente” y aclaró que fue ajeno a los procedimientos habituales de su actividad y responsabilidad del personal.
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