Definitivamente una propuesta de matrimonio debe ser impactante, llena de emoción y con un gran sentido de entrega hacia el otro. Pues bien, este ejemplo es el que mejor ilustra estas condiciones.
La propuesta tiene que tener algo de romanticismo, originalidad. Tiene que ser algo fuera de lo común. Algo que de tan romántico, no dude en decirte, “sí, quiero”.
Un hombre que busca la respuesta afirmativa a la pregunta más importante de toda su vida se arriesga a cualquier cosa, muestra de ello es a lo que se expone este hombre
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