Resumen: Preocupación por la baja en los niveles de embalses en Colombia, afectando el suministro de agua y la generación de energía. Las autoridades intensifican planes de contingencia.
La disminución constante en los niveles de los embalses ha agravado la situación hídrica en varias regiones del país.
El sistema de embalses de Chingaza, clave para el suministro de agua en Bogotá, registró un leve descenso al pasar de 44,91% a 44,88%, según el último reporte de las autoridades. De igual manera, los embalses del Agregado Norte bajaron de 53,71% a 53,62%.
Alfred Ballesteros, director de la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR), expresó su preocupación: “Llevamos seis meses con niveles bajos y deshidratados en los embalses”.
Destacó que el embalse de Marcela, fundamental para el abastecimiento de Bogotá y Cundinamarca, no ha superado el 50% de su capacidad desde enero, frustrando la meta de la Alcaldía de alcanzar el 70% en octubre.
El Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam) también alertó sobre el estado crítico de los embalses en otras regiones del país.
Lea también: ¿Si se puede? El DIM llega a Bogotá con dos sueños en la maleta
En el Valle del Cauca, la capacidad es del 25,95%, mientras que en Antioquia alcanza el 51,01%, en la región central el 53,45%, y en el Oriente el 59,79%. Estos niveles afectan tanto el suministro de agua como la generación de energía hidroeléctrica.
Las autoridades han intensificado los planes de contingencia, incluyendo campañas de ahorro de agua y la optimización de infraestructuras.
- Compartir:
- Compartir en Facebook
- Compartir en X (Twitter)
- Compartir en WhatsApp
- Comentarios