Hemos llegado al momento que nadie creía que sucedería en nuestro país, el día de la infamia ha llegado, nada más indignante para una sociedad que ver a sus verdugos dirigiendo nuestra nación, a los terroristas que destrozaron a Colombia, que asesinaron, secuestraron, extorsionaron, violaron mujeres y niños, reclutaron menores e invadieron de coca nuestros campos. Esos mismos, hoy sin haber pagado sus condenas y sin haber sido elegidos popularmente, ya son Senadores y Representantes a la cámara. Pero lo más desconsolador y inexplicable, es como el gobierno de Juan Manuel Santos, llevó de la mano y violando nuestras leyes al mayor terrorista de Colombia, alias” Timochenko” a ser candidato presidencial.

Todo los que advertimos los que nos opusimos a los diálogos de la Habana que iba a pasar si se firmaba un mal acuerdo, lamentablemente sucedió. Hoy las Farc, no entregaron todos sus bienes, ni siquiera informaron quiénes son sus testaferros, no entregaron todos los niños reclutados, no ayudaron a acabar el negocio del narcotráfico ni mucho menos entregaron sus rutas, adicionalmente quedó una retaguardia armada de más de 1500 disidentes y para rematar no pagaran ni un día de cárcel antes de ser elegidos Congresistas y tener un candidato presidencial, que tiene condenas por más de 470 años de prisión. Esto sí es la más grande infamia de la historia reciente de la humanidad. Nunca se registro un hecho así en una democracia moderna.

Nos llamaron mentirosos, que queríamos la guerra, desde Santos hasta el último negociador de la Habana aseguraban que jamás se iban a entregar curules del Congreso a dedo y menos que un criminal como Timocheko sería candidato a la Presidencia, hoy sabemos que es cierto y que la oposición siempre tuvó la razón, también la realidad nos muestra como muchas personas que votaron engañadas por el SI, creyéndole al mentiroso, embaucador y corrupto Presidente de Colombia Juan Manuel Santos, que no habría impunidad, hoy nos dan la razón y se arrepienten de haber apoyado esta falsa paz.

Nuestro país ha entrado en las más oscura de sus horas donde los terroristas son tratados como grandes dirigentes, entrevistados en los medios de comunicación y aceptados como conferencistas en las universidades, mientras la victimas de sus actos criminales y canallas ven como su profundo dolor es burlado y profundizado de la manera más absurda, descarada e inhumana posible.

Este no es el país que le podemos dejar a las nuevas generaciones, esta no es la nación por la que dieron la vida miles de hombres y mujeres luchando por la libertad, desde Bolívar hasta el más humilde de los campesinos. Ha llegado el momento de la verdad, de ponernos la mano en el corazón y decir hasta donde voy a luchar para que este hermoso país no quede convertido en otra Cuba u otra Venezuela Socialista. Acá estamos firmes y lucharemos de frente contra los terroristas en el Congreso o donde quiera que estén, unos daremos la batalla electoral para derrotarlos en las urnas, pero al resto de los ciudadanos Colombianos que aun creen en la libertad, en la justicia y en la Democracia, les suplicamos no ceder ni un paso atrás en esta gran batalla por Colombia.

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Redacción Minuto30

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