A sus 25 años, Natalia Bedoya es la candidata más joven en lanzarse al ruedo de la Cámara de Representantes en todo el país. Su juventud para nada es sinónimo de inexperiencia. Natalia es abogada y ya cuenta con una especialización en Derecho Administrativo. Lleva ya cuatro años de experiencia laboral tanto en el sector privado como en el público. La conozco hace 5 años y puedo dar fe de su dedicación y disciplina en todo lo que se propone.

Cada día en la campaña de Natalia empieza muy temprano en la mañana para salir a recorrer los municipios del Valle del Cauca. Todos los que la acompañamos somos voluntarios que creemos en el proyecto Cámara CD 103 y vemos en su candidatura el reconocimiento a los jóvenes y, sobretodo, al uribista de a pie del Centro Democrático.

A donde llega, los niños corren a rodearla para abrazarla, tomarse una foto o simplemente para caminar a su lado. Así es Natalia, tiene un imán natural para conectarse con los más pequeños. Aquí no hay maquinarias, herencias políticas, ni mucho menos derroche de dinero. Todo lo contrario: su sede son las calles y parques de los municipios. Sus herramientas son pendones, un parlante, un micrófono y su voz, con la que lleva, con una gran sonrisa, su mensaje. Cada conversación es una entrevista de trabajo, en cada una presenta su hoja de vida, sus propuestas y pone a consideración su candidatura. El reto es ganarse el voto, uno a uno, de cada ciudadano con el que habla.

Siempre comienza hablando de su proyecto bandera y el que más asombro y admiración causa: la reforma a la ley 100. La corrupción ha permeado nuestro sistema de salud y es necesario reformarla. Calificar a las EPS y excluir a las que presten un mal servicio.

Continúa con su segunda propuesta tiene que ver con reformar el régimen laboral y de pensiones. Nuestro código laboral data de 1950. Ya es necesario reformarlo. Como abogada experta en derecho laboral, sabe cómo hacerlo: Formalizar empleos, aumentar salarios y disminuir impuestos, beneficiar al trabajador sin afectar al empleador.

La tercera pretende reformar el Programa de Alimentación Escolar, PAE. Acabar con la corrupción que se ha tomado el programa es su objetivo. Asociar a las madres comunitarias para entregarles la alimentación de sus hijos y ejercer mayor control para asegurarse que los recursos se inviertan como debe ser.

Finalmente propone a cada ciudadano realizar controles políticos: el primero a Acuavalle por la mala prestación de servicios públicos en gran parte del Valle del Cauca. El segundo, al Gobierno Nacional por la incompetencia en el tema de los más de 2.800 niños reclutados por las Farc de los que aún no tememos noticias.

La jornada siempre termina muy tarde en la noche, cansados, pero con la alegría de estar haciendo una campaña con el corazón, que demuestra que sí se puede hacer política honesta. No es fácil, pero la satisfacción de escuchar a la ciudadanía y estar poniendo nuestro granito de arena para ayudar a construir el país que queremos, no tiene comparación.

Este 11 de marzo yo voto por Natalia Bedoya marcando Cámara de Representantes Centro Democrático 103 en el Valle del Cauca. Ayúdenos a demostrar que los jóvenes también podemos tomar las banderas del país, dándole la oportunidad con su voto a Natalia Bedoya, el 103 que representa renovación y juventud.

@andresportillo_

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Redacción Minuto30

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