Hace mes y medio se conoció la dolorosa historia de la mujer que fue agredida de gravedad por su pareja durante una visita conyugal en la cárcel Palogordo de Girón, mismo tiempo que Yenny Paola Correa luchó para mantenerse con vida, pero lastimosamente no lo logró.

Esta mujer recibió 14 heridas con arma blanca y desde entonces estuvo en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del centro asistencial, donde falleció en las últimas horas.

Sobre este feminicidio, Hernando Mantilla, defensor de los Derechos Carcelarios, señaló que aún no se entiende que sucedió ese 2 de abril cuando la mujer visita a un interno, para que posteriormente se genere la agresión.

El agresor se encontraba en el patio 8 del centro penitenciario y según se pudo establecer, el arma la había fabricado de manera artesanal.

Mantilla indicó que los familiares de Yenny le habían asegurado que ella era víctima de amenazas por parte de su compañero sentimental, razón por la que ella pretendía terminar la relación que sostenía con este hombre desde hacía 15 años.

De esta forma este interno ahora será juzgado por feminicidio, condena que se sumará a otra que cumplía por varios delitos.

“Es un hecho lamentable y delicado y que motiva a realizar un análisis ¿por qué los internos de las cárceles están armados? Si este hombre no estuviera armado no se hubiera registrado la muerte”, agregó.

Cuestionó además que el interno pudo pasar por varias secciones de la cárcel y al parecer no fue requisado, porque pudo llevar el arma hasta donde se encontró con la mujer, con quien al parecer tuvo una discusión.

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