Más de la mitad de los indígenas colombianos vive en la pobreza: PNUD

Más de la mitad de los indígenas colombianos vive en la pobreza y la mayoría de los niños de estos pueblos sufre desnutrición crónica, reveló hoy un estudio del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo.

Según la investigación, el flagelo afecta al 63 por ciento del total de la población de las comunidades autóctonas que es de 1,37 millones.

De ellos, 47,6 por ciento está por debajo de la línea de la miseria, destaca el diario El Espectador, en su edición digital.

En este país existen 102 pueblos originarios y 18 están en peligro de desparecer, de acuerdo con datos de la Organización Nacional de Indígenas de Colombia.

Aproximadamente 70 mil de los desplazados internos registrados son indígenas, cifra que ha crecido en los últimos años.

La Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) refiere que estos grupos huyen de sus territorios ancestrales a causa de las confrontaciones armadas, amenazas y masacres, entre otros factores.

Sufren la ocupación de sus lugares sagrados, confinamientos, controles sobre la movilidad de personas y bienes, controles de comportamiento, prostitución forzada, violencia, acoso y abuso sexual.

Señala la ACNUR que las comunidades indígenas son particularmente vulnerables, considerando que habitan en extensos territorios colectivos ricos en recursos naturales como biocombustibles, petróleo, madera.

A pesar de que la protección a estas comunidades está presente en la legislación colombiana no es garantizada, según denuncias de los propios indígenas.

La pobreza, el hambre, la desnutrición y la falta de acceso a servicios públicos elementales como salud y educación son algunos de sus problemas.

Aún está por resolverse el conflicto entre los indígenas del pueblo nasa en el departamento del Cauca con el Gobierno al que le exigen la salida del ejército y las guerrillas de su territorio convertido en escenario de guerra.

Líderes nasa presentaron un amplio paquete de al presidente, Juan Manuel Santos, entre las que destacan autorizar diálogos regionales de paz y la desmilitarización de lo que consideran sus territorios sagrados. Ahora esperarán dos meses por la respuesta gubernamental.

Fuenta: prensa-latina.cu