Más allá de la prohibición

Muchos ciudadanos hemos visto el video de unas niñas en Cali fumando marihuana, un video a todas luces escandaloso en el que incluso participa una menor de tan solo 5 años.

Evento que nos lleva a preguntarnos como sociedad ¿qué estamos haciendo para que las drogas no terminen acabando con el futuro y los sueños de nuestros niños? y la respuesta es que hacemos muy poco para mejorar esta realidad para los adolescentes y jóvenes de esta generación y las futuras.

Situación que nos lleva a pensar y a plantear soluciones a una problemática que tiene muchas complejidades y que deben ir mucho más allá de penalizar el consumo de la dosis mínima o prohibirla en los espacios públicos.

El debate desde mi punto de vista no debería girar en torno a estos dos temas que al final no solucionan el problema de fondo, el debate debería girar en torno a qué ya es hora de avanzar a que se trate esta problemática, desde el enfoque de salud pública.

Abordar la problemática con este enfoque permitirá que la nación destine recursos específicamente para este tema, recursos necesarios para fortalecer las políticas de prevención, consumo responsable y rehabilitación.

Así mismo al no criminalizar al consumidor, se puede contar con información confiable que permita caracterizar estadísticamente los datos del número de consumidores, la frecuencia del consumo e identificar si es un consumidor ocasional, recreativo, adicto o problemático; de esta manera se enfocarían los esfuerzos gubernamentales de una forma estratégica.

Con un esfuerzo así y mediante este enfoque, niñas como las del video estarían informadas de los efectos de estas sustancias en su organismo en el corto y largo plazo; también el estado estaría obligado a invertir recursos en su protección y rehabilitación, avanzando mucho más allá de la mera prohibición, a una solución integral enfocada en los niños y las personas consumidoras.

Por eso la invitación al gobierno nacional y a la opinión pública, es que más allá de las medidas enfocadas en la prohibición; pensemos en las soluciones de fondo a una problemática compleja que exige de nosotros un esfuerzo adicional, para que realmente le brindemos protección y orientación a los niños y consumidores víctimas de este flagelo.