La gran prueba de las democracias suramericanas

El momento actual no solo de Colombia sino de todas las democracias latinoamericanas demostrara la capacidad de lucha y la verdadera voluntad de los estados para poder combatir el fenómeno global de la corrupción. La multinacional Odebrech logro corromper los gobiernos de muchos países con comisiones cercanas a los 800 millones de dólares, demostrados públicamente por las confesiones de sus dirigentes ante el gobierno de los Estados Unidos.
Nuestros órganos de control en cabeza de la fiscalía general han iniciado una investigación muy exhaustiva para dar con todos los responsables de este gran escándalo, donde arroja como primeros resultados unos supuestos favorecimientos económicos para las campañas de Juan Manuel Santos y Òscar Iván Zuluaga.

Inicialmente me llama la atención como las directivas de ambas campañas reaccionan totalmente diferente, el Presidente Uribe como máximo líder del centro democrático, envía al comité de ética de su partido para que investigue al máximo y sancione las conductas reprochables que se hayan cometido y a su vez solicita a la fiscalía que llegue hasta el fondo para determinar las responsabilidades, por otro lado los voceros del Presidente Santos reaccionan airadamente negando alguna relación con los dineros de Odebrech, igualmente lo hacen congresistas de la unidad nacional sin darle el tiempo prudente para que se hagan las respectivas investigaciones que con pruebas físicas determinen la inocencia o culpabilidad de de cada campaña.

Será el momento donde tendrá la gran prueba nuestro fiscal si se comprueban los delitos, donde si bien es cierto que el concejo nacional electoral será el que imponga las sanciones si se ratifica ser ciertas las declaraciones en contra de ambas campañas, el fiscal tendrá que acusar la campaña de santos, de lavado de activos, financiación ilegal por parte extranjeros y demás delitos relacionados que daría un golpe contundente a la presidencia de Juan Manuel santos.

Es el momento para que la deteriorada reputación de la justicia colombiana empiece a recuperar la credibilidad de los ciudadanos, las cortes y el fiscal anterior fueron simplemente subordinados de Santos, lo pudimos ver claramente en el caso de las cortes como suplantaron la democracia colombiana en el plebiscito e ignoraron los resultados electorales.

Cualquier mandatario en el mundo hubiese renunciado a la presidencia si perdía el plebiscito mas impórtate para su administración, como lo hizo el primer ministro británico David Cameron con los resultados del brexit, acá en Colombia no fue así y por el contario Santos no solo no renuncio, sino que ignoro los resultados y demostró que las altas cortes no tienen independencia en Colombia y reciben instrucciones directas del Presidente, el cual las recompensa con contratos para los parientes de los magistrados, como pudo comprobarse.

Ahora los colombianos esperamos que haya la suficiente independencia para que el fiscal pueda tomar decisiones trascendentales en Colombia y llegue a la verdad de este gran escándalo y en caso de que se confirma el ingreso de dineros corruptos a la campaña de santos, no nos vaya a salir el presidente con la disculpa “eso se hizo a mis espaldas” y tenga el coraje de renunciar y así demostrar lo que tanto ha dicho que luchara de frete contra la corrupción.