La Barca de Calderón, William Calderón

Siquiatra al ataque.

En La Barbería del sábado 23 de abril, el ex comisionado de Paz Luis Carlos Restrepo abrió las compuertas de la represa uribista para hacerle un juicio crítico al presidente Santos.

Se duele el siquiatra quindiano de “la falta de coherencia del Mandatario, quien llegó a la Casa de Nariño con un programa y gobierna con otro”.

En su sentir, “Santos fue elegido por una coalición de Unidad Nacional y se apartó de ella para compartir el poder con la oposición a Uribe, representada por Cambio Radial, el partido del ministro Germán Vargas y el Liberalismo del ex ministro Rafael Pardo”.

Otros reparos.

Según el ex asesor de Uribe, “el Presidente abandonó la seguridad democrática y se dedicó a la prosperidad, representada en ser figura de primera plana en periódicos y revistas, medios fácilmente manipulados por él”.

Subraya que “lo único que le interesa al Presidente es la fotico y salir, asimismo, en las portadas de las revistas semanales, como gran amante que es de la proyección de la imagen, así como viajar, viajar y viajar”.

Agua al cuello.

A juicio del ex director del Partido de la U, “mientras todas estas cosas pasan en el gobierno, el país se ahoga como consecuencia de la nueva arremetida del invierno que otra vez cogió fuera de base a los entes encargados del manejo de la crisis invernal”.

Al fenómeno desencadenado por las fuerzas de la naturaleza, el ex asesor de paz suma el accionar de la guerrilla que de nuevo hace de las suyas en diversas regiones del país: vuela torres de energía; dinamita oleoductos y puentes; pone lanchas-bombas, ataca cabeceras municipales, asesina militares y civiles, secuestra, roba, boletea y extorsiona; la frontera con Venezuela es un verdadero polvorín y nadie dice nada.

Y, según el médico de Filandia, “el Presidente no se da por enterado”.

La entrevista se retransmite hoy a las 8 de la noche.

Una vela a Dios y otra al diablo.

Esta la estrategia adoptada por el uribismo en el Congreso, encabezado por el presidente del Senado Armando Benedetti.

Un contertulio le dijo al barquero que a Restrepo lo van a dejar hablando solo, pues mientras esté la nómina oficial de por medio y sigan pendientes nombramientos derivados de la reestructuración de los nuevos ministerios, más los de la reapertura de las embajadas cerradas por la anterior administración, el Presidente mantendrá el control del uribismo y esta organización política se irá desgranando en la medida en que aparezcan nuevos puestos y se vean caras nuevas a bordo de los carros oficiales.

Lo que más sorprende a los “uribistas pura sangre” es la pasividad, aparentemente conciliadora, del presidente de la U, senador Juan Lozano, quien celebra misa católica en templo protestante, pues le prende una vela a Dios y otra a Satanás y se reserva el cirio para los Santos.