Hace unos días observé un video donde el actor y político Bruno Díaz, se refiere al Senador de la lista de la Decencia y promotor del pacto histórico Gustavo Bolívar como “El Falsario”, debido a que este no realizó un pago a su hijo Diego Díaz fallecido en abril de 2021, una deuda de 200 millones de pesos por la instalación de unos paneles solares en el hotel que el Senador muestra con mucho orgullo. La preocupación y el estrés de Diego Díaz al no poderle pagar a los bancos no permitió que viviera tranquilo los últimos días, tampoco a su familia y amigos cercanos como Felipe Pasos.

Lo triste de la historia es que las personas que se atreven a denunciar y a comunicar el incumplimiento del Senador con sus amigos, coequiperos y personas con las que hace negocios, son objeto de maltratos en las redes sociales por supuestas bodegas que también ocasionaron la muerte de Felipe Pasos. Indignante que después de esta historia Petro no rechace la mala actuación del Senador Bolívar, al contrario, lo defendió; privilegiando la política, los engaños, mas no el sufrimiento y el dolor “humano” de las familias afectadas por Gustavo Bolívar.

El Senador Bolívar llegó al Congreso de la República en el año 2018 vendiéndose como un adalid de la moral, transparente, el salvador, el renovador de la política colombiana, que llegaría a cambiar los modelos tradicionales; pero se ha dedicado a hacerle daño al país, incendiándolo de cualquier manera, difundiendo noticias falsas sin importarle a quien afecte, agrediendo sin compasión a la fuerza pública, insultando e injuriando a sus compañeros y últimamente a no pagar todos los impuestos que era una de sus banderas ; es por esos hechos por los que realmente ha brillado en el Senado.

En el “paro nacional” se dedicó a recoger recursos para dotar a los vándalos de la llamada “primera línea” de cascos y elementos para atacar la fuerza pública, elementos que también fueron usados para destruir bienes públicos y privados, así como agredir, en muchas ocasiones, a los ciudadanos. Es decir, ha hecho de todo menos proponer desde su posición de congresista proyectos de ley que mejoren las condiciones de vida de los colombianos.
Acá la reflexión es la siguiente, ¿hasta cuándo se va a seguir siendo permisivo con el bullying y el matoneo?

Se debe promover el respeto como un valor sagrado, es injusto descalificar las demás personas solo por pensar diferente en temas políticos, ideológicos y religiosos. Ahora bien, los dirigentes tienen la responsabilidad de tomar medidas y en vez de salir a respaldar estas actuaciones que se suscitan desde bodegas, donde se invierten miles de millones para hacer daño, deben propender por censurar y erradicar estas prácticas.

La coherencia y la honestidad deben ser mínimos indispensables en un líder, si los líderes no defienden la verdad, sino que por el contrario auspician el odio y la mentira, no vamos por el camino correcto; ¿Senador porqué mientras hablaba de donar su sueldo, mostrar su mansión y yates de lujo, porqué no pagó sus deudas? ¿porqué no buscó llegar a un acuerdo de pago y así no llevar al desespero a las personas a las que les adeudaba? Esta es una gran muestra de irresponsabilidad de su parte.

Casos como el de Diego y Felipe (Q.E.P.D.) Y muchos más que no alcanzan la atención de los medios de comunicación deben erradicarse, las redes sociales no pueden ser plataformas para imponer posiciones y destruir a quien no piense del mismo modo, Senador Bolívar, usted y sus coequiperos hablan de la “Política del amor” pero no la aplican, contenga la gavilla de twitteros a los que usted comanda, este mezquino actuar no puede seguir cobrando vidas de personas que se atreven a denunciar su accionar, entienda la posición que tiene, lo invito para que con esta reflexión levante las banderas para erradicar toda forma de bullying o matoneo contra cualquier ser humano. ¡CUIDADO COLOMBIA!

Vamos a recuperar y fortalecer el liderazgo de Antioquia.

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Redacción Minuto30

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