Los medios de comunicación – como lo hemos visto en la actualidad – tienen una línea editorial totalmente marcada. En la mayoría de ocasiones están enfocados en establecer productos de opinión y no productos que indaguen sobre lo profundo de la realidad. Es por esta razón que realmente los medios se han convertido en el cuarto poder, pero no por su calidad investigativa o informativa, sino por su claridad para influenciar sentimientos colectivos en la sociedad.

Normalmente tendemos a identificarnos con un medio. Es por eso que existen pocas personas que se tomen la molestia de leer varios diarios o varias plataformas para de esta forma comparar y establecer una contextualización mucho más amplia.

Es así como la mayoría de periodistas o medios hemos aclarado en muchas ocasiones que se es imposible ser objetivo de fondo, porque cada persona ha vivido en circunstancias totalmente diferentes y construyo criterios poco parecidos. Por lo tanto – aunque su intención sea otra – estará contando una historia desde sus prejuicios ideológicos o espirituales. La pregunta que cualquier ciudadano puede plantearse es ¿están hechos los medios de comunicación para mostrar las ambas caras de la historia?

Naturalmente una parte de la historia con la que nos identificamos y nos sentimos informados está incompleta, por lo que los ciudadanos – naturalmente o por instinto – la completamos con prejuicios. Es aquí donde nace el problema fundamental de la historia contada bajo solo una visión, pero donde también nace su misma solución. Solución que no solo permitirá contar ambas partes de la historia, sino además transformar la cultura critica de la ciudadanía colombiana.

El problema fundamental de los ciudadanos Colombianos es que construimos el significado de nuestra Nación, cultura y política bajo conceptos meramente emocionales y no bajo conceptos racionales. Vemos un titular sobre corrupción y nos encanalizamos por la magnitud del robo político, pero realmente nunca nos indagamos sobre ¿cuál fue el robo? ¿De qué manera nos están robando? Y ¿Cómo podemos evitar este tipo de robos?

Sin embargo, esto se debe a que el ciudadano tiene una participación receptiva y no propositiva o participativa respecto a los contenidos establecidos por los medios. Algunos medios lo han intentado resolver abriéndole un espacio crítico al ciudadano, pero este espacio se ha centrado en acusar al escritor y no en la participación del lector.

Un día – un grupo de jóvenes universitarios – buscaron la manera para que la ciudadanía pasara de la cultura de la acusación, al debate de ideas. Entendieron que el verdadero poder de la información no está sujeta a un medio de comunicación tradicional, sino a la interacción directa con la ciudadanía.

Así es como nace un nuevo paradigma de la información, así es como nace INCIDENCIA ORG. Una StarUp que no solo se encarga de informar a la ciudadanía, sino además se encarga de generar foros de participación ciudadana, donde los ciudadanos innoven su forma de pensar, donde los ciudadanos transformen su forma de criticar, donde los ciudadanos transformen el mundo con información, emprendimiento e innovación.

Abraham Lincoln decía:” La democracia es el gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo”. La información en la actualidad hace parte del pueblo, pero si el pueblo no se apropia de ella no estará ejerciendo una verdadera Democracia.

Author Signature
Redacción Minuto30

Lo que leas hoy en Minuto30... Mañana será noticia.

  • Compartir:
  • Comentarios

  • Anuncio