Foto tomada de Mundo Deportivo

La vida le dio tremendo giro al jugador de fútbol Hakan Sukur, conocido por anotar el gol más rápido de todos los mundiales, pues ahora se gana la vida como conductor de Uber.

Y es que a sus 48 años, el máximo goleador histórico de Turquía, sobrevive lejos de los lujos que alguna vez tuvo, todo por una decisión política que tomó hace algunos años.

El mismo exdeportista relató que fue víctima del gobierno de Erdogan que lo mandó arrestar por «pertenecer a un grupo terrorista», en referencia al grupo opositor liderado por Fethullah Gülen.

Él pudo marcharse a Estados Unidos a empezar una nueva vida pero su padre acabó encarcelado: «Soy enemigo del gobierno, no del estado ni de la nación turca. Amo nuestra bandera y nuestro país».

Abrió un bar pero lo tuvo que cerrar después de que un cliente se hiciera una foto con él y recibiera persecuciones sospechosas.

Ahora es propietario de un Uber y trabaja en Washington alejado de los focos: » Erdogan me quitó todo. Mi derecho a la libertad, el derecho a explicarme, a expresarme, el derecho al trabajo», explica el ex jugador turco.

Con info de medios internacionales.

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Redacción Minuto30

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