Sabrina una brasileña, disfrazó de esclavo a su hijo de 9 años, le tomó varias fotografías que publicó en Instagram, provocando la polémica que desató cientos de comentarios con fuertes críticas.
Pero la mujer no solo recibió rechazo cibernético, también en la escuela del niño manifestaron que con la caracterización que usó para la celebración de Halloween, “tocó una herida histórica del país” y que rechazaban “cualquier expresión de racismo”.
Por lo anterior, la brasileña tuvo que disculparse públicamente y a través de su perfil en la red social.