En Argentina, fueron detenidos 47 barristas de Racing, cuando se preparaban para emboscar al grupo oficial de la Guardia Imperial, la barra más popular del club.
La Agencia de Prevención de la Violencia en el Deporte, controló antes de tiempo lo que podría haberse convertido en una batalla campal.
La facción oficial estuvo presente en el partido ante Mitre por Copa Argentina, en el estadio de Banfield.
Les hallaron armas de fuego, navajas, varas de metal, entre otros. Fueron trasladados hasta la Comisaría #1 de Lanús, pero posteriormente fueron dejados en libertad.