El insomnio es la dificultad para iniciar o mantener la fase del sueño, puede ser provocado por el estrés debido a preocupaciones laborales o personales, efectos secundarios de algunos medicamentos, entre otros.

Fotografía tomada de internet.
En esta ocasión analizamos cinco alimentos que también pueden dificultar la facilidad para conciliar el sueño.
El alcohol:
Estudios demuestran que el alcohol causa que te levantes frecuentemente durante la noche. lo que impide entrar a una fase de suño profundo. También reduce el sueño REM, lo que hará que te sientas sin energía durante el día. Por eso aconsejan tomar una copa dos horas antes de acostarse, para evitar una noche problemática.
Productos a base de tomate:
Cualquier cosa con una gran cantidad de ácido puede causar ardor de estómago y molestias durante la noche, y eso incluye a los alimentos que están hechos a base de tomate y el picante. Se recomienda dejar la ingesta de estos alimentos tres horas antes de acostarse.
Cafeína:
Algunos medicamentos de venta libre contienen cafeína, al igual que muchos tés. Si eres sensible a la cafeína, comienza a optar por lo descafeinado y a revisar las etiquetas de las medicinas que estás planeando tomar, por lo menos ocho horas antes de irte a la cama.
Fluidos:
El agua es genial para bajar de peso pero puede tener un efecto negativo despertándote constantemente durante la noche para ir al baño. Y no sólo interrumpe el ciclo de sueño, sino que también corta el sueño REM. Trata de evitar el consumo de líquidos dos horas antes de tu hora habitual de ir a la cama, para asegurarte de que en realidad pases toda la noche en ella, y no en el baño.
Alimentos fermentados y embutidos:
La tiramina, un aminoácido que se encuentra en los alimentos fermentados y añejos, estimula el cerebro y podría mantenerte despierta durante la noche. Evita el queso añejo, el pescado ahumado y los embutidos antes de dormir, y mejor opta por algo más fresco como el queso mozzarella.
Las frituras:
Múltiples estudios indican que los alimentos altos en grasas, como las papas fritas, no solo pueden producir que subas de peso. También pueden interrumpir los ciclos normales del sueño.
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