El tiempo del desprecio renovado. Dejar la grieta atrás y abrir un zanjón

A poco de asumir Alberto Fernández el nuevo Gobierno en la Argentina, se empieza a ver la mano de la Ex Presidente y actual Vicepresidente Cristina Kirchner, quien desde ese lugar, toma las decisiones relevantes y estratégicas del gobierno.

Cristina Kirchner, siempre será lo que ha sido y, su aparente lugar secundario en la campaña de Alberto Fernández, a quien ella misma nombró y anunció como su candidato a Presidente fue solo pura táctica.

A poco de ganar las elecciones el peronismo, la Ex Presidente abandono su abstinencia discursiva, sus gestos amables y palabras solidarias de la campaña, para mostrar con acciones claras, su deseo de llevar adelante una venganza lenta, movilizada por el rencor atroz que la mueve.

Así fue, como quedo reflejado de manera asaz dramática, cuando participando de unos de los juicios por corrupción que nunca pudieron materializarse en condena y castigo efectivo, más allá de las voluminosas y contundentes pruebas silenciadas por años, no quiso responder preguntas frente a los magistrados que la interpelaban.

En efecto, la Ex Presidente Cristina Kirchner les dijo a los jueces, que eran ellos quienes deberán responder preguntas por su actuar y por investigarla y, no ella, que ya había sido absuelta por la sociedad.

Cual ha sido la característica de esta primera etapa de la transición del nuevo Gobierno?

Han sido cuatro y, todas muestran que la Ex Presidente Cristina Kirchner esta al mando del gobierno, por retomar la senda clásica del Kirchnerismo en la concepción, manejo y ejercicio del poder.
De nada sirve, la moderación impostada y el equilibrio retorico vació del Presidente Alberto Fernandez para intentar disimular esta realidad.

Sus subordinadas acciones a los designios de su Vicepresidente Cristina Kirchner son elocuentes y evidentes.

Las cuatro características principales de la transición han sido:

1) Asegurarse el manejo de los recursos públicos sin control. Hacerse del dinero y la caja.

Señale oportunamente que la primera ley que debía mandar el gobierno al parlamento era el presupuesto.

Sin embargo, con la excusa de que el presupuesto presentado el 16 de Septiembre de 2019, no reflejaba las variables macroeconómicas, el real diagnostico y estimaciones de la economía, se presento la emergencia económica, para hacerse del manejo discrecional de los recursos, garantizándose una concentración de poder sin control.

Hubo tiempo de reformular ese presupuesto o formular otro. Se naturalizo, desde muchos sectores de la sociedad, que había derecho a retomar la senda de la discrecionalidad y el poder sin control.

Alertamos que volvíamos a poner el poder en las personas y no en las instituciones y que esto nunca traería nada bueno porque el poder sin control siempre oprime, conculca derecho y quita libertades.

Sostuve en el parlamento que esta emergencia será la clave de bóveda de la discrecionalidad a través de un poder que desmantela y desguaza al Congreso de la Naciòn.

A ello, se le sumo, luego de la emergencia y el ajuste a los jubilados, el impuestazo en la Provincia de Buenos Aires y el manotazo de un porcentaje de la coparticipación en CABA, por decreto, en un atropello que muestra el barbarismo político anunciado y ordenado por la Vicepresidente Cristina Kirchner contra el distrito.

La nueva construcción política reposa en la discrecionalidad y la desmesura. No hay voluntad de construir estabilidad y fortaleza política en la calma y la equidad.

2) Iniciar el camino que consagre definitivamente la impunidad. Maniatar la Justicia.

Cristina Kirchner considera que la sociedad la indulto y por lo tanto ya no deberá rendir cuentas de la corrupción organizada de su gobierno y de las investigaciones pendientes y en curso ( 14 procesamientos y 5 pedidos de detención por atroz corrupción no concretados, incluso el Memorándum firmado para garantizar la impunidad de los Iraníes perseguidos por la voladura de la Amia y el asesinato del fiscal Alberto Nisman que la denunció).

El discurso del Presidente de la Naciòn Alberto Fernandez al asumir en el Congreso de la Naciòn, planteo un nunca mas de la justicia, abonando esa idea de la Ex Presidente, en el sentido de cuestionar se haya investigado toda esa corrupción monumental que el mundo no discute.

El Presidente de la Naciòn, embuido de la urgencia de la Ex Presidente Cristina Kirchner por clausurar las investigaciones judiciales que la comprometen, llego a pedir por la liberación de los presos políticos, como así define con cinismo, a los funcionarios presos por corrupción.
Lo penoso y luctuoso, es que fue logrando su cometido, al tener este reclamo, un escandaloso correlato judicial. Así pues, a medida que pasaban los primeros días del nuevo gobierno en el poder se iban liberando presos por corrupción.

Ganar una elección no debe cambiar la justicia ni dar lugar a la impunidad. La Vicepresidente Cristina Kirchner cree que el poder es impunidad y la elección determino que la corrupción debe pasar a la alfombra del olvido.

Han avanzado, hasta llegar al dislate de intentar reinstalar con pericias deliverys la idea que Maldonado fue asesinado, mientras al mismo tiempo, se vuelve con la fabula del suicidio de Nisman, queriendo tapar este crimen de Estado.

El desenfreno con que han puesto el ojo sobre la justicia y el deseo de maniatar y sujetar su independencia es un alerta que nos debe comprometer a no permitir volver a pasar por los mismos lugares del pasado: los de la impunidad y el poder absoluto, omnipotente y desbordado.

Todo esto, es una idea que tiene por fin, poner una pica en Flandes, que signifique a través de una reforma judicial, terminar con la justicia independiente y la división de poderes en el pais, para ir a una justicia servil y domesticada al poder político, como los Kirchner instalaron en la Provincia de Santa Cruz hace años.

La justicia construye el futuro. Presionar a la justicia para consagrar la impunidad afecta el rendimiento de la democracia.
La política no es sinónimo de delito y lo que paso en la Argentina en los años del Kirchnerismo es que asociaron la política al delito.

3) Relajar los controles en materia de Seguridad. Rienda suelta al narcotráfico.

Es gravísimo que la Ministro de Seguridad Sabina Frederic haya dispuesto disolver la Secretaria de Lucha contra el Narcotráfico que tan bien estaba trabajando en éste tema, que había sido la peor herencia recibida en el 2015, del gobierno de Cristina Kirchner; la instalación definitiva de narco en el pais.

Realmente se trata de una medida que deja de lado una tarea fundamental y nos vuelve a colocar a merced del narco. Denuncié los vínculos del gobierno de Cristina Kirchner, con Miraflores en éste tema. Que se persigue? Volver a las panamericanas de la droga?.

4) La vuelta al default de las Relaciones Internacionales. La diplomacia encapuchada.

El mundo cambia y su realidad se vuelve más compleja. Como pais debemos hacernos nuevas preguntas y contribuir a alumbrar un nuevo paradigma democrático en el ámbito de las relaciones internacionales y la diplomacia.

Hoy vemos como Hezbollad no es solo un problema de Irán ni Maduro y Diosdado Cabello un problema solo de Venezuela.

Hezbollad, como grupo terrorista, tiene presencia y operaciones en América Latina, donde se resguarda y encuentra cobijo en los nexos solidos establecidos con el redimen criminal venezolano y se extiende desde allí en el Continente.

Fue el Chavismo quién intercedió y convenció a Cristina Kirchner para entenderse con Irán y firmar el Memorándum, que significo otorgarles impunidad a quienes estaban sindicados como autores de la voladura de la Amia.

No debemos volver a la diplomacia encapuchada que practico Cristina Kirchner, a través de la cual genero y mantuvo relaciones de reciprocidad y complicidad con organizaciones criminales y grupos delincuenciales.

Alejarnos del mundo y tener de aliado a Miraflores y, a través de estos a grupos terroristas y narcotraficantes, no nos traerá nada bueno.

Lejos quedará la posibilidad de acceder a buen financiamiento como lo hacen otros paises y obtener inversiones y posibilidades de abrir mercados para vender nuestros productos y crecer.

Búsqueda de dinero, impunidad, vía libre al narcotráfico y diplomacia encapuchada, no parece ser indicadores de que hayan vuelto a mejorar su pasado, sino mas bien a recrudecerlo.

Conozco y denuncie por años el pasado que vuelve. El pasado que viene, nos vuelve a poner frente a la misma tarea no aprendida: lograr establecer los anticuerpos institucionales y sociales para que lo que paso no pueda volver a suceder y así construir nuestro futuro democrático republicano.

«Quien sabe del pasado sabe del porvenir» decía Ramón María del Valle Inclán.

No se pretende dejar la grieta atrás, vienen con los mismos métodos de la cooptación y la destrucción de toda disidencia a instaurar un zanjón.

Tengo claro, que el desafío más importante de Cambiemos es no fragmentarnos ni deshilacharnos como opinión al Kirchnerismo.

Esto resulta fundamental para estar a la altura de la tarea encomendada de representar con mayor fuerza y firmeza al 41 % de los argentinos que nos eligieron. Sino lo hiciéramos, resultara una quimera, pensar siquiera, en ofrecer liderazgos a la sociedad para recuperar el gobierno en 2023.

Diputado Nacional Unión Cívica Radical
Ciudad Autónoma de Buenos Aires