El tamaño del pene va cambiando con el crecimiento, sobre todo a partir de la pubertad. Cada varón tiene un ritmo de crecimiento personal y único, hasta el punto de que el desarrollo de los genitales externos puede ser diferente entre adolescentes de la misma edad (por ejemplo, la cantidad de vello corporal y el tamaño del pene).

Más allá de estos datos lo importante es que no olvides que esta medida no es lo que determina la calidad de una relación sexual. Hay quienes se fijan en aspectos biológicos como el tamaño del pene cuando piensan en la calidad de las relaciones sexuales. Pero su argumento es tan equivocado como los que sostienen la idea de que el olor del perfume es esencial para ser sexualmente atractivo y tener éxito en el acto sexual.
¡No te equivoques! Lo esencial en la sexualidad no es ni llevar perfume, ni el tamaño de una parte de tu cuerpo, aunque esa parte sea importante. Lo esencial es saber amar.
Aprender a amar, a querer el bien de la otra persona por encima de tus propios deseos, es lo que te permitirá desempeñar bien todos los aspectos de la vida, incluida la actividad sexual.
Con información de abc.es
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