Luego de conocer el escueto comunicado del Deportivo Independiente Medellín donde se anuncia la finalización del contrato de Ismael y Juan Rescalvo en la dirección técnica, se queda con la sensación del infortunio que tiene el hincha poderoso con los directivos del equipo.

Al mejor estilo de Villate, Castillo y del inolvidable Jorge Osorio Ciro, don Raúl Giraldo paso a paso y con su peculiar estilo de manifestar que quiere mucho al equipo pero que no lo vende (supuestamente nadie lo quiere comprar), administra al Medellín como el supermercado que lo volvió millonario, sin entender que son dos negocios distintos.

Si bien el “Gemelo” presentó resistencia en cierto sector de la hinchada por su inexperiencia en la dirección técnica y su falta de roce en finales, logró a mi parecer una buena campaña con el Medellín hasta el punto de ubicarlo en los primeros lugares de la reclasificación y con los puntos necesarios para alcanzar un cupo en un torneo internacional.

Desde esta columna hemos reiterado nuestra posición al manifestar que si bien don Raúl Giraldo tiene mucho dinero, no tiene el suficiente para ubicar al equipo que tiene el nombre de nuestra ciudad y que es uno de los más tradicionales e importantes del país, en el nivel administrativo que se merece.

Medellín carece de una estructura administrativa como la deben tener los grandes equipos de fútbol. El embeleco de don Raúl impide continuar con un proceso de un director técnico. No le importa subir al tope la boletería en una final porque su interés no es la hinchada, es el dinero.

Aduce cada vez que sale en los medios de comunicación que se está haciendo el mayor esfuerzo para el bien del equipo y no hay tal, pues lo que hace es la búsqueda de su propio beneficio sin importarle el sentimiento del poderoso seguidor.

Nuevamente el hincha rojo queda en ascuas. Verá como su equipo empieza de cero con un técnico que tendrá la excusa necesaria para decir que necesita tiempo para conocer sus jugadores. No será raro que contrate nuevamente un timonel de aquellos que se denominan de la ‘farándula’, los cuales por la falta de encontrar un equipo para dirigir, acuden a la TV como comentarista de partidos. Ejemplos y personajes de estos estamos llenos.

Se aprovecha el embeleco de don Raúl de un sentimiento, de una hinchada y por ello estoy seguro que aparte de Germán Ezequiel Cano, saldrá nuevamente con la ausencia si es que lo hace, de contratar jugadores top. Ya me imagino al nuevo técnico con la presión que le impondrá el mayor accionista, decir en los medios que no necesita tantos jugadores y que mejor fortalecerá las inferiores.

Estoy seguro que por no continuar un proceso y para evitar las recomendaciones que el cuerpo técnico saliente presentó en la contratación de nuevos jugadores, optó mejor por prescindir de sus servicios porque ese es el Embelecó de don Raúl.

A los Rescalvo de mi parte y estoy seguro de muchos hinchas poderosos, tenemos sino frases de agradecimiento y ojalá esa experiencia adquirida en un equipo grande como el Medellín, sea fructífera en otro igual.

@emecorrea

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Redacción Minuto30

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