Gran lección ética le está dando Iván Duque Márquez a Colombia, a su desprestigiado sistema político, a todos los enmermelados periodistas y políticos, a los partidos tradicionales, a los lagartos, a los oportunistas y porque no decirlo también a los Corruptos que tanto daño le han hecho al país y que consolidaron su emporio en el gobierno de Juan Manuel Santos.

DUQUE con su gran estructura intelectual, su sólido programa de gobierno, su bagaje académico, su atípico perfil político y su juventud, sumados a su gran don de gentes está rompiendo todos los estereotipos y los colombianos ahora ya todos unidos en su gran mayoría están viendo en él, la gran esperanza que el país necesita para empezar a solucionar la grave crisis institucional sin precedentes que deja el gobierno de Juan Manuel Santos.

De todo se ha dicho de Duque, incluso los que no lo conocíamos bien dentro del partido llegamos a especular sobre sus condiciones y no fue, sino que, de manera coherente, decente, sin hablar mal de nadie, solida, consecuente, sin hacer pactos ni concesiones, vertical y perseverante, empezara a dar a conocer su programa de gobierno por todos los rincones del país para despertar en los colombianos confianza y esperanza.

No ha sido fácil el camino y tampoco lo será su gobierno. Gobernar y empezar a solucionar los inmensos problemas del país con la olla raspada, el déficit fiscal y el endeudamiento externo que deja el gobierno de Juan Manuel Santos tomara tiempo y tendremos que llenarnos de mucha paciencia. Seguramente le llegarán muchas críticas anticipadas, porque las soluciones no se vislumbrarán rápidamente. Implementar su programa de gobierno será una tarea de titanes.

Desmarcarse del flagelo de la corrupción y atacarla de frente y sin contemplaciones, será sin duda su gran reto, lo desgastará hasta mas no decir, pero lo logrará. Implementar el emprendimiento, la economía naranja, la generación de empleo y toda su visión de país, con la actual estructura burocrática del país implicará romper con muchos paradigmas y pisar muchos callos, pero valdrá la pena esa gran revolución programática que propone Duque. Los colombianos tenemos y debemos apoyarlo sin condiciones para sacar a Colombia del naufragio.

El 17 de junio del 2.018 se cumplirá su primera meta y el 7 de agosto del 2.018 iniciará una nueva era para Colombia que marcará sin duda un panorama de gran desarrollo. Buen viento y buena mar.

@PoliticaPuntual

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Redacción Minuto30

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