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USA (Es)La obra fue adjudicada por el IDU al consorcio mixto Promesa de Sociedad Futura, pasada la medianoche de este jueves y tras una larga audiencia de más de nueve horas. Ese consorcio está integrado por El Cóndor Construcciones S.A. (Medellín) y Sainc Ing. Constructores S.A. (Cali).
La adjudicación se dio pese a las constantes críticas de los vecinos, de los expertos, de un sector de la clase política e incluso de las observaciones hechas por la Procuraduría al proyecto.
En la puja por la obra, que cuesta unos 84 mil millones de pesos, también participaron otros dos consorcios, donde estaban presentes firmas como Valorcom y Conconcreto.
Hacia noviembre de este año, según el IDU, deberán empezar los trabajos sobre el corredor más emblemático de Bogotá, donde se pondrá en marcha un detallado plan de tráfico para evitar grandes congestiones.
La troncal deberá estar lista en 14 meses, es decir, hacia noviembre del 2011, lo que llevará al Distrito a realizar un gran esfuerzo para impedir los atrasos que se presentaron, por ejemplo, en la calle 26 o en la carrera Décima.
De lo contrario, la obra no sería entregada en la alcaldía de Samuel Moreno e impactaría gravemente en la puesta en marcha del Sistema Integrado de Transporte Público (SITP).
¿Por qué razón? Se requiere que las troncales en construcción (10a., calle 26 y 7a.) estén completamente finalizadas para lograr la articulación de los buses con TM.
Una mirada a la hoja de vida de la firma El Cóndor deja ver, por ejemplo, que participó en la construcción de TransMilenio en la avenida Caracas y en la NQS y actualmente realiza mantenimiento de vías en el centro de la ciudad.
Por su parte, Sainc construye en estos momentos el puente de la glorieta de la calle 100 con 15, en el norte de Bogotá, y que se financia con dineros aportados por los ciudadanos en la más reciente valorización cobrada en el 2007.
Polémico cambio
Pese a que en el 2006, durante la alcaldía de Lucho Garzón, se invirtieron unos 9.000 millones de pesos para construir una troncal de TM entre las calles 34 y 170, la administración de Samuel Moreno decidió recortarla.
Es decir, se pasó de un proyecto que valía 800 mil millones de pesos -y que se quedó en estudios porque la obra no fue adjudicada por el entonces alcalde Garzón- a uno de apenas 84 mil millones.
La troncal que se va a construir no tendrá sobrepasos y sólo llegará hasta la calle 72 . En ese punto se hará un ‘ramal’ para conectar la troncal de la Séptima con la de la avenida Caracas.
La obra no tendrá espacio público, andenes y mobiliario urbano y las estaciones estarán ubicadas en las calles 36, 42, 46, 53, 60, 67 y en la calle 72.
El principal argumento esgrimido por el Distrito para recortar los diseños originales fue el proyecto de la primera línea del metro.
Según la Alcaldía, cuando los trenes entren a operar en el 2017 por el corredor oriental (entre carreras 11 y 13), se descongestionará la demanda de la Séptima y, por esa razón, no se necesita una troncal con todas sus especificaciones iniciales.
Pero justamente en este punto es donde radican las principales críticas. De hecho, la Procuraduría ya le pidió al IDU un plan detallado sobre cómo se ampliaría la troncal de la Séptima, en dado caso de que el proyecto del metro no prospere.
«Preocupa a este despacho que dentro de la decisión adoptada respecto al diseño de la carrera 7a., se haya tenido como eje fundamental el trazado definido a la fecha de la Primera Línea del Metro», señaló la Procuraduría, en carta al director del IDU, Néstor Eugenio Ramírez.
La audiencia fue transmitida en directo por televisión durante tres horas y se contempló el sorteo mediante balotas electrónicas, certificadas por Incontec, en caso de que se hubiera presentado un empate.
Vía ElTiempo.com
Yesid Lancheros
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