El próximo 27 de mayo los colombianos tenemos una cita con la democracia y no podemos ser inferiores a la responsabilidad histórica que tenemos. En estas elecciones nos jugamos el futuro de la patria y tendremos que decidir si queremos el populismo que acabó con la hermana Venezuela, el continuismo de los ocho años de desgobierno de Santos, o si por el contrario, elegimos un cambio de ruta y votamos por un país de legalidad, equidad y emprendimiento.

Como joven me siento identificado con Iván Duque, pues pertenece a esa generación que representa al 73% de colombianos que tenemos menos de 45 años. Su juventud para nada es sinónimo de inexperiencia, por el contrario, es garantía de una hoja de vida limpia, con cero corrupción y cero politiquería.

Como Senador de la República destacó por su trabajo legislativo y fue elegido mejor senador por dos años consecutivos, una prueba más que como Presidente de Colombia no será inferior al reto. Impulsó desde el legislativo la Ley de la Economía Naranja, que beneficia la industria creativa del país. Es además un abanderado de la innovación y el emprendimiento como forma de dinamizar la economía.

Con nuestro voto podemos decir: ¡no más! al continuismo del nefasto gobierno de Santos, el mismo de los escándalos de corrupción, el que derrocha el dinero de los colombianos, el que compra conciencias y el que premia criminales y envía el mensaje de que delinquir paga.

Con nuestro voto podemos frenar la llegada del socialismo del s. XXI, el mismo modelo político que acabó con Venezuela, Cuba y con cuanto país ha tocado. Con nuestro voto podemos detener el populismo que desprecia la iniciativa privada y pretende expropiar a los colombianos de lo más valioso que tenemos: nuestra libertad.

El Estado debe garantizar la libre empresa, la libertad económica con reglas de juego claras y sobretodo una justicia independiente. Colombia necesita aumentar salarios y disminuir impuestos, racionalizar el gasto público (no mas derroche por parte del gobierno), simplificar el sistema tributario y ofrecer estabilidad jurídica a la inversión. Iván propone formalizar empleos con ingresos justos. Ser una mano amiga de los empresarios y los trabajadores.

Colombia debe enviar el mensaje a la sociedad que el que la hace la paga. No mas gobierno cómplice de criminales. Hoy más que nunca es necesario un gobierno que se comprometa a modificar los acuerdos con las Farc: el narcotráfico NO puede ser delito conexo al delito político, la impunidad a delitos de lesa humanidad NO puede ser una opción y las víctimas deben tener verdad, justicia y reparación efectivas.

El único candidato que se compromete con estas propuestas se llama Iván Duque. Por eso salgamos a votar este domingo masivamente por él, con nuestro voto lo podemos elegir en primera vuelta y ahorrarle al Estado mas de $250 mil millones de pesos. Elijamos en primera vuelta a Iván Duque, el pollo que se convirtió en Gallo y hoy tiene las espuelas listas para gobernar a Colombia.

@andresportillo_

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Redacción Minuto30

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