500 menores víctimas y el caso de Claudia Morales, la perfecta radiografía de un país que nada le importa, una justicia inoperante y personas ofendidas en las redes sociales.

El país que nada le importa. Cuando conozco de una notica que degrada las mujeres, las violenta, las mata; y en contraprestación cuando hablo de mujeres y me dicen “pero si ya somos una sociedad incluyente” la vida se encarga de darme una bofetada recordándome la desidia en que vivimos. Dejemos de hablar paja, no es porque Claudia no dice quien fue su victimario, simplemente es porque Claudia es un personaje público y su victimario también, o ¿cuánta gente está indignada por los 500 menores violados? ¿Cuántas por las victimas de feminicidio que llevamos este año? Somos un país enfermo, amarillista, morboso, la mayoría de los que hablan de Claudia solo quieren saber el nombre del victimario sin importarle porque no quiere divulgar el nombre ni denunciar, y creo que es por el miedo que genera un país a lo que nada le importa y una justicia inoperante.

Si, una justicia inoperante. Hace un par de años tienen bajo custodia a un violador en serie, lo liberan por un tecnicismo (vencimiento de términos), hace un par de años una niña es violada con sevicia en una ESTACIÓN DE POLICÍA, pasaron muchos años acusando al padre, luego identifican a uno de los policías bachilleres como autor del asqueroso delito (cuelga a la niña del techo y la viola), es real, no hay lugar seguro. Y ahora como gran hazaña en un proceso tan conocido sale la fiscalía a decir que va a investigar el delito cometido contra Claudia, no me malentiendan eso es lo que se debe hacer pero quiero saber también en que van las investigaciones de los 4 feminicidios ocurridos este año en Medellín; sobre todo cuando los feminicidios en este país están precedidos de denuncias por violencia intrafamiliar sin resolver. Conocí un caso en el que no quisieron recibirle la denuncia a una mujer por que no estaba sangrando.

Personas ofendidas en redes sociales y la famosísima indignación del sofá. Ya nos ha pasado antes, toda una revolución efímera. Trinamos, actualizamos los estados, compartimos las noticias; pero seguimos hablando mal de las mujeres, haciendo chistes sexistas, piropeando en la calle, morboseando las mujeres que se ponen falda corta, silenciado las voces con el miedo, amenazando con el dinero o con el trabajo, etc. Personas indignadas en redes y violentas contra las mujeres en la cotidianidad.

A Claudia mujer valiente, espero que entiendas que no estás sola y puedas denunciar a tu victimario, a todas las mujeres que han pasado por situaciones parecidas y no han podido hablar, no se callen griten por las que están y por la que vienen, recuerden no están solas.

A Sandra Catalina, Rosa Elvira, Yuliana Andrea, los 500 menores o más de los que aún no sabemos sus nombres, de las mujeres asesinadas en Monserrate, y todas aquellas que murieron o han sido violentadas, etc. Mi mayor deseo es que sus casos sirvan para que esta sociedad se quite la venda y el importaculismo; para que trabajemos hombres y mujeres por la igualdad y la equidad.

Abogada, feminista y voluntaria
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Redacción Minuto30

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