Si quisiera quedarme en las cifras les diría que diariamente en nuestro país 48 niños son evaluados por abuso sexual y sé, con certeza, que ese sería un argumento de peso para que ustedes sientan como ciudadanos, papás, hermanos e hijos, la indignación que me mueve a trabajar por la niñez y salir a las calles a pedirle a Medellín que nos unamos para que los violadores, maltratadores y asesinos de niños sean castigados con la cadena perpetua.

Pero las razones van más allá, porque es inadmisible que criminales (no encuentro otro nombre para un agresor de un niño o niña) capaces de secuestrar, golpear, abusar y hasta matar un niño puedan volver a ver la luz del día. Es indignante que alguien capaz de violar a un infante, pague en promedio 10 o 12 años de cárcel, aunque la ley permita asignarles hasta 60 años de prisión.

Y es que, más allá de lograr un aporte significativo desde Medellín a la petición de cadena perpetua para violadores y asesinos de niños, desde el Concejo de Medellín lidero una cruzada en defensa de todos los derechos de los niños, un proceso en el que logremos un entendimiento pleno de que los niños están primero que cualquier otra población, que si logramos el bienestar para ellos Medellín habrá emprendido un camino certero hacia la transformación verdadera de la ciudad.

Hoy desde esta columna, y desde cualquier espacio en que la vida me permita estar, quiero pedirles, como siempre, que se unan a esta causa de trabajar sin descanso por la niñez, que juntos conformemos un equipo en defensa de sus derechos y en denuncia de todas las vulneraciones de las que puedan ser víctimas, que nos unamos en torno a la visibilización de las problemáticas que se relacionan con nuestra primera infancia y que como ciudadanos hagamos, desde nuestras posibilidades #PorLaNiñezTODO

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Redacción Minuto30

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