Con un golpe en la cabeza, así mataron a Maximiliano en Remedios, Antioquia

Maximiliano tenía seis años y su muerte conmocionó al país por las circunstancias que fueron revelando las investigaciones. Su muerte fue el resultado de un entramado criminal en el que intervino una secta satánica, su madre y otros personajes que hoy están respondiendo ante la justicia.

Medicina legal dijo hoy que Maximiliano murió a causa de un fuerte golpe en su cabeza, con objeto contundente, lo que le provocó una fractura diastásica en el cráneo.

La fiscalía deberá investigar y aclarar quién de los seis acusados es el responsable de este homicidio como autor material.

El menor fue hallado enterrado en un sector de Segovia, cercano a su casa. Ese 27 de octubre, completaba un mes y más desaparecido. Finalmente fue la confesión de su propia madre la que llevó a las autoridades al sitio exacto donde se encontró su cuerpo.

La historia es dantesca, pues Maximiliano fue la víctima entregada a modo de sacrificio en un ritual satánico y relacionado con la extracción de oro, actividad de la que subsisten cientos de familias de la zona ubicada en el nordeste de Antioquia.

Su madre, padrastro y hasta su propia abuela están comprometidos con el atroz crimen que aún resuena en las calles de Remedios.

Maximiliano se convirtió en el símbolo de una pérdida de valores sistemática en la que los menores de edad se usan como instrumentos comerciales y su vida no se respeta. En este caso, como en otros, son sus propios familiares los que rompen con la responsabilidad de cuidar de su bienestar y seguridad.

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