Abril 1: Salir o salir

Frente a un desgobierno que se hizo al poder por medio de la trampa, el engaño y el desconocimiento de la voluntad de pueblo en las urnas, salir a la calle no es una opción, es un deber. No hay de otra, salir o salir.

En los números de desaprobación de los gobiernos en Colombia, se encuentran pocos antecedentes que indiquen un desastre similar al de Juan Manuel Santos, quizá el de Ernesto Samper, quién descendió a un 19% en desaprobación y todo indicó en su momento que ese gobierno “se iba a caer”. Hoy se repite la historia, tal vez no sea casual que el “A mis espaldas” y “me acabo de enterar” sean más que una vergonzosa frase que los ubica en el mismo descaro y perversión, Santos superó en desaprobación a su socio Samper, al que en su momento le pidió renunciar. ¡Debería hacer lo mismo esta vez!

La mayoría de colombianos tienen sus razones para marchar: Frente a un desgobierno que se hizo al poder por medio de la trampa, el engaño, la financiación fraudulenta, la compra de medios y el desconocimiento de la voluntad de pueblo en las urnas, salir a la calle no es una opción, es un deber. No hay de otra, salir o salir.

Si le duele que Colombia ocupe el primer lugar en cultivos ilícitos en el mundo, si no encuentra explicación al por qué unos criminales de lesa humanidad son tratados como héroes nacionales, si lo ahogan los impuestos que finalmente quedan en los bolsillos de unos cuantos políticos y medios de comunicación a cambio de aprobar y celebrar cada despropósito del desgobierno del 18%, si lo indigna saber que quienes ordenaron explotar  bombas  acabando con la vida de personas inocentes ahora hablen en el congreso; si no concibe que los responsables de amarrar por más de 10 años a personas en medio de la selva ahora hablen en universidades; si rechaza que los familiares de los miembros del alto gobierno sean los más prósperos contratistas del Estado, si supo cómo el gerente de la  campaña “Santos Presidente”  utilizó recursos del BID para dirigirlos a sus empresas, si usted, al igual que la mayoría del pueblo colombiano está hastiado de este remedo de gobierno, lo invito a salir éste 1 de abril a las calles y hacer sentir su voz.

El 2 de abril de 2016 las calles de Colombia se sacudieron, se advirtió que Colombia no quería el camino de complacencia a las Farc y de mal gobierno, no escucharon; El 2 de octubre Colombia volvió a enseñar que pese al matoneo, el desprestigio, la falsa acusación, el país fue superior y brindó un triunfo histórico a favor de la protección de las instituciones, el desconocimiento al resultado por parte de Santos, ¡es otro motivo para marchar! No puede haber cansancio cuando de luchar contra este perverso régimen se trata, van a pasos acelerados a tomarse la justicia y el poder electoral, vieja lección del rancio comunismo que, si no enfrentamos en debida forma, se nos volverá una realidad en nuestro país. Abril 1: Salir o salir.

@hernancadavidma