A las farc no le gustó la Comisión Asesora de Paz

Al grupo narcoterrorista de las Farc, no les gusto la integración de la comisión asesora de paz nombrada por el presidente Santos recientemente, así lo hizo saber al iniciarse el ciclo 34 de la mesa de diálogos en la Habana y, de la misma manera el editorial del seminario Voz periódico del partido comunista colombiano del 18 de marzo, le hace críticas a la comisión por excluyente, pues no se tuvo en cuenta a su aparato denominado Frente Amplio por la Paz, lo cual demuestra que los seguidores de la secta marxista leninista no solo tienen patología por el poder, sino también por figurar.

La comisión asesora de paz nombrada por el gobierno, no tiene carácter vinculante, pero de ella hacen parte las organizaciones más destacadas de la sociedad civil, encabezadas por la Iglesia Cristiana Católica, con el Cardenal Rubén Salazar, además hay presencia del máximo dirigente sindical que tiene el país que es Julio Roberto Gómez presidente de la CGT, central obrera que ha demostrado ser dentro de los trabajadores la de mayor capacidad de convocatoria, también hay representación en dicha comisión de las negritudes e indígenas, amén de los más importantes sectores políticos y empresariales que tiene el país, subrayando que el Centro Democrático, no participa en ese organismo.

En Colombia, Hay por lo menos 4.000 sindicatos registrados en el Ministerio de Trabajo y miles de organizaciones populares y sociales, con personerías jurídicas o registros mercantiles, aparte de los entes que se constituyen de hecho, todos los cuales podrían pedir participación en la Comisión asesora de paz, con lo que se crearía una especie de torre de Babel, pero por eso el gobierno busca a los sectores más representativos.

Algunos dirigentes de organizaciones de la sociedad civil que no fueron tenidos en cuenta en la comisión asesora de paz, podrán figurar en el consejo nacional de paz que en cualquier momento convoca el gobierno, porque en materia de negociaciones de paz hay para todos los gustos y, quienes quieren hacer protagonismo ya sea con representación real o ficticia tienen la opción que les da la ley 434 de 1998, así que la preocupación burocrática de los cabecillas de las Farc esta sobrando.

No hay que olvidar que la banda terrorista marxista dentro de sus actos de vesania cometidos atraves de 50 años para tomarse el poder, asesinaron a dirigentes sociales y sindicales porque no estaban de acuerdo con su accionar, por ello es claro que el grupo guerrillero de las Farc no representa al pueblo, resaltando que la palabra pueblo para los seguidores del comunismo totalitario dentro de la semántica leninista tiene un significado diferente al que conocemos los demás mortales, de ahí que los jefes guerrilleros no tienen ninguna autoridad para decir quiénes pueden representar a la sociedad civil.

La lucha social no obstante las dificultades presentadas en la historia del país, se ha dado gracias a dirigentes auténticamente democráticos que sin doblez han servido a las causas nobles de las reivindicaciones inmediatas e históricas de la población, por ello las Farc que abrazan una doctrina abyecta como la marxista leninista que enseña perversamente, a que no importa que su teoría sea criminal con tal de que se cumpla en la práctica, tampoco puede hablar a nombre del pueblo al cual han perseguido y martirizado y, además el grupo armado ha conspirado en contra del desarrollo de la lucha social ya que con sus actividades criminales, en ocasiones se estigmatizan y confunden a organizaciones populares que no tienen nada que ver con la banda terrorista.