Los enfrentamientos se presentaron en los alrededores de la unidad deportiva, y en otros sectores como la calle San Juan con la carrera 65, inmediaciones de las estaciones Suramericana y Floresta del Metro, en la Alpujarra, la Avenida del Ferrocarril con la calle Colombia, cerca de la Plaza de Flores y en el Parque de Boston.

Cabe recordar que al interior del estadio no se presento ningún inconveniente y el comportamiento fue ejemplar, debido entre otras cosas a los rigurosos controles de la Policía Metropolitana. Los menores retenidos pasaron la noche en la Unidad Permanente de Derechos Humanos y luego quedaron a disposición de la Comisaría de Familia, frente del Parque de los Deseos, por disposición de la policía donde están siendo reclamados por sus familiares.
El clásico se repetirá el próximo sábado a las 6:20 PM lo que obligará a las autoridades a redoblar los operativos de control para evitar nuevos incidentes entre los aficionados.
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