
Foto: @Diario_ElDia
Ximena Suárez, la azafata que sobrevivió a la tragedia que hace un año enlutó al mundo, se refirió al accidente y a lo que sucede en su vida en la actualidad.
Suárez, madre de dos niños, no solo tuvo lesiones de consideración sino que además enfrenta una depresión de la que aún no se recupera totalmente.
Como un refugio y una oportunidad de mejorar su situación económica, que se vIo fuertemente afectada luego del accidente, la mujer se concentró en el modelaje.
“Realmente ayudó. Volví a cuidarme físicamente, a caminar… Es un pasatiempo que me ocupa mientras me preparo para volar”, dijo Ximena al medio Globo Esporte de Brasil.
La mujer, que además ha dictado conferencias en varios países de Latinoamérica, se tatuó en su espalda, cerca a las costillas, un avión como recuerdo de lo que tuvo que pasar.
Aunque todavía no está lista para volver a volar, Ximena ha dicho que espera volver a hacerlo. Incluso, para sus conferencias usa su antiguo uniforme de la aerolínea LaMia.
Ximena aseguró que su sueño es volver a su trabajo y volar de nuevo, pero aseguró que aún no está lista para retomar.
Estoy tratando de vivir como modelo … Me gustó el resultado! pic.twitter.com/MmWnZEs6yc
— Ximena Suárez (@XimenaSuarezott) 7 de julio de 2017
- Compartir:
- Compartir en Facebook
- Compartir en X (Twitter)
- Compartir en WhatsApp
- Comentarios
