La indignación del concejal Campuzano y sus espinosas declaraciones

Minuto30.com .- Tras las duras opiniones del concejal de Medellín Juan Felipe Campuzano en las redes sociales, debido a la inseguridad que se vive en la capital antioqueña, entrega un comunicado de prensa donde explica el contexto de los trinos que levantaron ‘ampolla’ en algunos sectores y que para las mayorías fueron certeros.

Comunicado de Prensa

En un país en donde la delincuencia desafortunadamente está ganando la batalla institucional y legal a las autoridades, todos los debates que estén direccionados a encontrar soluciones y conocer los puntos de vista de los ciudadanos, no solamente son validos, son además necesarios, pues en últimas somos quienes sufrimos por estas realidades que no se pueden ocultar.

Mis opiniones personales manifestadas en las redes sociales, específicamente twitter, surgidas por el descarado homicidio del joven medico Daniel Areiza a manos de sicarios, quienes le causaron la muerte por hurtarle su motocicleta (según las versiones de las autoridades sobre los hechos) han generado un debate local y nacional, y sobre estas consideraciones, quiero manifestar:

1. El debate del endurecimiento de penas y la contemplación de la pena capital, así como el de fortalecimiento de la justicia, en mi opinión, debe darse con toda seriedad y profundidad de cara a la sociedad; desde luego es una posición que de alguna forma rompe con los esquemas mediáticos en Colombia, para muchos críticos el orden constitucional y legal, sin embargo la demencia, la sevicia y la frialdad con que los delincuentes comenten sus crímenes en este país, no encuentran disuasión y oposición alguna en nuestro Código Penal, ya la política criminal parece insuficiente.

2. Algunos llaman a estas opiniones, retrógradas y radicales, pero lo cierto es que alrededor de 60 países en el mundo contemplan la pena de muerte, y donde absolutamente todos coinciden en su aplicación, es en el asesinato; entre estos países se encuentran no solo regímenes totalitarios como Corea del Norte y Cuba, sino también otros más moderados como Emiratos Árabes Unidos (Abudabí, Dubái), China, Singapur, etc; y en democracias absolutas como la de los Estados Unidos de América, conocida como la democracia más estable y confiable del mundo. (Estos últimos países; Emiratos Árabes Unidos, China, Singapur y los Estados Unidos de América, cuentan con opiniones divididas; para unos estos países son retrógrados y del Medioevo y para otros, como yo, prósperos y modernos (incluyendo su sistema penal y de justicia), por otro lado muchísimos más países contemplan la prisión perpetua, incluyendo gran parte de los países europeos así como muchos de los países del mundo. (Sinceramente el debate está abierto y hay que darlo).

3. Referente a la ‘justicia en propias manos’ (interpretación de algunas personas y nunca posición mía) siempre he manifestado, incluso en el mismo medio en cuestión (twitter), que como ciudadano y político respetuoso y afecto de las instituciones legalmente constituidas, propendo por un Estado sólido que posea el monopolio de la fuerza y las armas, y que esté en capacidad de impartir justicia, autoridad y orden, en el entendido que el ciudadano de bien se vea plenamente protegido en su dignidad, bienes y honra como lo consagra la Constitución. La justicia en Colombia no puede ser simple letra que se utiliza en pocas ocasiones, se debe consolidar un Estado en donde el respeto por los ciudadanos sea la bandera principal del desarrollo, con ejemplares castigos desde la Ley y las instituciones.

4. He sostenido y sostengo que es execrable, deplorable, vergonzoso e inaceptable para mí y para cualquier ciudadano con sentido de sociedad, fenómenos terroristas como los del paramilitarismo, guerrillas, bacrim, combos y/o cualquier grupo delincuencial. (En esto he sido enfático, ningún grupo al margen de la Ley se debe tolerar, independiente de su presunta convicción).
Por último, mis convicciones son y obedecen al espectro político de la derecha conservadora, es y ha sido siempre mi intención ser absolutamente claro en mis posiciones, buscando única y exclusivamente ser transparente con los ciudadanos y no escudarme en tecnicismos de marketing político para quitarle lo más preciado que tienen al interior de una democracia, que es el voto. Así mismo como miembro activo de esta sociedad, ciudadano y político, tengo derecho a pensar y opinar libremente, aunque los términos y las formas no sean compartidas (dentro de la legalidad que me caracteriza), porque mi búsqueda es y será ayudar a transformar este país; pero eso sí, nunca con el silencio cómplice y mucho menos con la indolente e infame indiferencia.

Respetando las diferencias y agradeciendo el apoyo.

Juan Felipe Campuzano.