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Resumen: América de Cali, conocido como el cuadro escarlata, aseguró su lugar en el repechaje de la Copa Sudamericana, el premio de consolación de la Conmebol para los segundos de cada grupo. A pesar de no poder alcanzar el primer puesto, logró este objetivo con un empate sufrido ante Racing de Montevideo, que se combinó con una victoria de Huracán sobre Corinthians, cumpliendo así una de las condiciones necesarias para quedarse con el ansiado cupo.
¡Agónico y sufrido, pero adentro! América de Cali consiguió su cupo a la Sudamericana
América de Cali lo logró, como sea, al cuadro escarlata le alcanzó para quedarse con el cupo del repechaje, el premio de consolación de la Copa Sudamericana.
Como se recordará, en esta competencia de la Conmebol, solo clasifica el primero de cada grupo y el segundo debe jugar un repechaje con el club que baje como tercer de la Libertadores.
El cuadro escarlata, en efecto, se quedó con ese cupo, ante la imposibilidad matemática de quedarse con el primer lugar del grupo.
Pero lograrlo no fue fácil. ‘La mecha’ necesitaba un triunfo suyo y un empate o victoria del juego de Huracán contra Corinthians.
O la otra opción era un empate en el Pascual Guerrero y una victoria del equipo argentino sobre el brasileño.
En efecto eso ocurrió, América empató contra Racing de Montevideo, pero no fue cualquier empate, éste estuvo precedido de una impresionante carga de sufrimiento para los hinchas escarlatas.
El sufrimiento empezó luego del insólito error del portero Jorge Soto. El guardameta, que sin duda ha estado en alza, en este caso se equivocó.
Soto quiso sacar rápido, sin embargo, la pelota golpeó en el brazo de un jugador de Racing, el rebote le quedó a un compañero y con el arco solo, el visitante se fue arriba.
La mano no fue sancionada como ilícita toda vez que el jugador estaba de espaldas y desatendido de lo que ocurría en cancha.
El error de Soto llegó al minuto 75 del compromiso. Mientras Huracán le ganaba a la ‘mecha’ el escarlata ‘se sacaba solito’ por esta acción.
Los minutos pasaron, la angustia desbordaba las tribunas y las uñas de los hinchas se acabaron.
Al minuto 95, ya a segundos de acabarse el juego, Jean Pestana logró cazar un rebote del portero de Racing de Montevideo y con ello, agónicamente logró el empate.
Ese empate fue suficiente para que el equipo de Jorge ‘el Polilla’ Da Silva se pudiera meter en la fase de repechaje de la Sudamericana.
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