Alias Guandú, cabecilla del ‘Clan del Golfo’, capturado por andar extorsionando a agricultores

En una operación conjunta entre el Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía, el Gaula del Ejército Nacional y la Fuerza Aérea Colombiana, fue capturado en Yopal, Casanare, José Arandú Segua, alias Guandú o Fermín, cabecilla del ‘Clan del Golfo’. El hombre, quien se encontraba en el centro de una red de extorsiones a agricultores y comerciantes, fue detenido tras más de 8 meses de seguimiento e investigaciones por parte de la Fiscalía General de la Nación.

Alias Guandú, de acuerdo con las investigaciones, lideraba una estructura criminal que se dedicaba a imponer cuotas ilícitas a los productores agrícolas, particularmente a los arroceros de Casanare. La extorsión variaba según la cantidad de hectáreas cultivadas, con montos que iban desde los 30.000 hasta los 90 millones de pesos, dependiendo del tamaño de la propiedad. Las víctimas eran sometidas a amenazas e intimidaciones constantes, lo que generaba un ambiente de miedo y coacción en las zonas afectadas.

El caso comenzó a tomar fuerza luego de que varios comerciantes y agricultores denunciaron las amenazas que recibían, especialmente del sector arrocero de la región. Estas denuncias llevaron a la Fiscalía a iniciar una exhaustiva investigación que permitió identificar a José Arandú Segua como el líder de esta red de extorsión.

Durante la captura, se encontraron pruebas suficientes que vinculan a Guandú con el control de las actividades criminales del ‘Clan del Golfo’ en el oriente de Colombia. Esta estructura ilegal había adquirido aún más poder en la región tras la muerte de Robinson Oquendo Guisao (alias Camilo), quien fuera abatido en una operación policial en Mapiripán, Meta, en septiembre de 2024. Tras su muerte, alias Guandú asumió el mando de la organización en Casanare.

La captura de alias Guandú representa un golpe significativo a las actividades del ‘Clan del Golfo’ en la región, y se espera que esta acción sirva para desmantelar la red de extorsiones que afecta a miles de agricultores y comerciantes de la zona. Tras su detención, el acusado fue presentado ante un juez de control de garantías, quien le imputó los delitos de concierto para delinquir con fines extorsivos. El procesado no aceptó los cargos y deberá cumplir medida de aseguramiento en un centro carcelario mientras continúa el proceso judicial en su contra.

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