“Il traditore” triunfa en la noche del cine italiano, marcada por la COVID-19

La cinta “Il traditore”, del director Marco Bellocchio, ganó anoche el premio “David de Donatello” a la mejor película que otorga cada año la academia de cine italiano en una edición muy particular, en la que los candidatos y premiados siguieron la gala de forma telemática por la crisis del coronavirus.

La película, que cuenta la historia basada en hechos reales del excapo Tommaso Buscetta, el primer informante sobre la mafia de Sicilia en la década de 1980, se hizo con seis estatuillas: mejor film, mejor director (Bellocchio), actor principal (Pierfrancesco Favino), actor de reparto (Luigi Lo Cascio), mejor guión original (Bellocchio) y mejor montaje ( Francesca Calvelli).

“Il traditore” ya fue la apuesta de Italia en la carrera por el Óscar para el mejor filme de habla no inglesa de 2019 y en esta sexagésima quinta edición de estos galardones, los más prestigiosos del celuloide italiano, partía como favorita con 18 nominaciones.

Fue sin duda la gran triunfadora de la gala, presentada por el italiano Carlo Conti en solitario, pues como consecuencia de la pandemia del coronavirus no pudo contar con la presencia de los nominados de la gran pantalla, que siguieron la celebración en remoto, desde sus casas, como el resto del público.

El reconocimiento a mejor actriz fue para Jasmine Trinca por “La dea fortunà”, que ya recibió este mismo premio hace dos años por “Fortunatà”, mientras que el premio a la mejor actriz no protagonista fue para Valeria Golino por “5 e’ il numero perfetto”.

La prometedora “Pinocho” de Matteo Garrone, que cuenta con Roberto Benigni en el papel de “Geppetto”, se hizo con los premios a mejor escenografía, mejor maquillaje, mejor vestuario, mejor peluquería y efectos especiales.

“Il primo re”, que cuenta la fundación de Roma y la lucha fratricida entre Romolo y Remo, se tuvo que contentar con mejor fotografía, mejor producción y mejor sonido; mientras que mejor banda sonora fue para la Orchestra di Piazza Vittorio por su aportación en “Il Flauto Magico Di Piazza Vittorio”.

El film “Selfie”, di Agostino Ferrente, venció el premio a mejor documental y el de mejor director novel fue para Phaim Bhuiyan por “Bangla”, la historia de un joven italiano, cuyos padres son de Bangladesh, que vive en Roma y trabaja en un museo.

La surcoreana “Parasite”, triunfadora en la pasada edición de los Óscar con cuatro galardones, incluidos los de mejor película y mejor director, se hizo también con el premio a mejor película extranjera de la academia de cine italiano.

La ceremonia también contó con las palabras del jefe del Estado, Sergio Mattarella, que habitualmente saluda a los candidatos en la gala y que este año lo hizo por carta.

Mattarella recordó las dificultades por las que atraviesa el sector en este momento de emergencia por el coronavirus y habló del cine “como un arte soñado que se hace realidad gracias a muchos profesionales que tienen la difícil tarea de desarrollar la cultura y proteger nuestro patrimonio”.

EFE