El trabajo coordinado entre la Armada Nacional, el comando de Guardacostas y autoridades de Estados Unidos y Panamá, permitió la interdicción de tres embarcaciones que transportaban cinco toneladas y media de cocaína con rumbo a las costas centroamericanas y al mercado negro de los Estados Unidos.
La incautación del alijo de cocaína se logró gracias al patrullaje aeronaval de la Fuerza Naval del Caribe y la Fuerza Aérea, que avistaron la navegación de las embarcaciones a poco más de 120 millas náuticas (200 km) frente a la costa del Golfo de Morrosquillo, por lo que se alertó a las patrulleras navales de Panamá y Estados Unidos, que adelantan operaciones de vigilancia e interdicción en las aguas del Caribe Occidental.
En la primera acción, el Grupo Aeronaval del Caribe y Unidades de Guardacostas apostadas en aguas territoriales en Coveñas, interceptaron una embarcación de la que sus navegantes arrojaron 1.915 kilos de clorhidrato de cocaína.
El patrullaje de la Fuerza Aérea permitió el avistamiento de una lancha rápida, también en aguas colombianas, que después de una prolongada persecución con las patrulleras navales colombo-americanas apostadas sobre ese sector, lograron la interceptación de la misma y al abordaje por parte de las autoridades fueron hallados 88 bultos que en conjunto sumaros 2.100 kilos de cocaína pura.
El tercer caso de interdicción se logró en aguas territoriales de Panamá, con la interceptación de una embarcación, cuyos ocupantes al sentir el acoso de las unidades navales de Panamá, Colombia y Estados Unidos, decidieron lanzar por la borda 56 bultos, en los que se contabilizaron 1.367 kg del estupefaciente.
De acuerdo con el comandante de la Fuerza Naval del Caribe, Vicealmirante Hernando Enrique Mattos, el valor de la droga incautada supera los 184 millones de dólares y se convierte en la más grande de las aprehensiones logradas en lo corrido del año, que suman más de 45 toneladas en operaciones de interdicción en aguas del Caribe.
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