Conocer y decidir

Un amigo me hizo llegar un documento con 162 propuestas de Iván Duque para la reconstrucción del país que nos deja el espurio, en donde se expresa como exposición de motivos para lanzar 162 propuestas para subsanar el estado de cosas en el cual estamos, lo siguiente:

“Los colombianos estamos indignados. Las cosas no van bien y necesitamos actuar. Nos duelen los impuestos asfixiantes, las dificultades para crear y ver surgir un negocio, los abrumadores trámites burocráticos, las demoras en responder a las necesidades de quienes generan empleo. Nos afecta ver que la justicia premia a quienes han cometido los peores crímenes de nuestra historia, bajo el abuso de la palabra “paz”. Vemos que la corrupción campea descaradamente por todas partes mediante abusos de la contratación directa, carteles de contratistas, políticos financiados por sus compinches e instituciones prisioneras de la politiquería y el clientelismo.

La agenda social está débil. La informalidad afecta la sostenibilidad del sistema de salud y del sistema pensional y afecta severamente el sistema tributario. Nuestro campo tiene en la informalidad un enemigo tenebroso. Colombia necesita un cambio que permita recuperar la economía, brindar seguridad efectiva con justicia ejemplar a los criminales, construir equidad y una mejor asignación de los programas sociales hacia los más vulnerables, además de dar una lucha sin tregua contra la corrupción. Nuestro deber es transformar la indignación en acciones de cambio, para evitar que el populismo prospere en nuestro país”

Ante este párrafo me pregunto: ¿Qué de lo que aquí se afirma es mentiroso?, ¿Desde hace cuánto sufrimos por este tipo de situaciones que en parte se quisieron cambiar con el referendo negado a Uribe?

Cuando subieron tramposamente el # de votantes y por ende el umbral para su aprobación, impidieron que muchas de las propuestas tendientes a mejorar el estado de cosas aquí descritas se pudiesen implementar; todo por el afán clientelista de los politiqueros que manejaron la registraduría y con todas las artimañas conocidas y desconocidas consiguieron frenar el despegue de Colombia hacia una nación más justa, equitativa y progresista al disminuir el tamaño del estado y convertirlo en un coordinador y propulsor de proyectos de desarrollo de políticas sociales, económicas, de salud, educación, desarrollo del campo, seguridad en todas sus acepciones, justicia pronta efectiva y justa y en fin, todas esas condiciones requeridas para que una comunidad alcance niveles aceptables de convivencia.

Lo que se pretendió con ese referendo está plasmado en el párrafo entre comillas que transcribí antes como exposición de motivos del proyecto de gobierno del candidato del centro democrático. Ante esa realidad no entiendo el porqué muchos de los que se dicen ser uribistas o afines al centro democrático, intentan desconocer el resultado de un mecanismo aceptado y avalado por todos los aspirantes, para la selección del candidato oficial del CD. Con esa descripción y muchas de las propuestas que se desarrollan en el documento descrito elegimos a Uribe en el 2002 y lo reelegimos en el 2006. Las cosas cambiaron un poco durante los 8 años de gobierno.

Cuando llegó el tramposo y espurio retrocedimos en el tiempo y llegamos hasta los oscuros períodos de gobierno del elefante, la catedral, el desgobierno de Barco, las corrupciones de Turbay a sus justas proporciones, la que dio inicio frentero a desconocer las normas éticas de comportamiento con el pollo López y el clientelismo rampante de todos los presidentes del Frente nacional que destruyeron los partidos y los convirtieron en agencias de empleo para sus copartidarios y los del otro partido que no estaba transitoriamente en el poder.

Con muy pocas diferencias durante estos últimos y muy largos 7 años regresamos al estado corrupto y amangualado con unos pocos para beneficio de ellos o quienes sostenían al espurio en esa supuesta alta dignidad que perdió su majestad cuando se convirtió en la propulsora de todo tipo de corrupciones. La justicia, la contratación, la distribución de las regalías y en fin todas las herramientas posibles se usaron para sostener un falso proceso de paz con el cual engaño a tirios y troyanos de las bondades excepcionales que traería para Colombia y el mundo el conseguir que los narcoterroristas más antiguos del mundo se plegasen a unas normas que se trastocaron para que unos pocos dirigentes se jubilasen y consiguiesen acceder al poder con la impunidad y sin gastar un denario en sus campañas. Es tal la capacidad de engaño que hasta premio nobel compró.

El documento debemos conocerlo y una vez leído y entendido podremos opinar sobre la real vocación y el compromiso cierto del candidato elegido. Opinar que no me gusta porque no me genera confianza o descalificarlo porque supuestamente es seguidor de Soros y buscar la manera de dividir al CD., no es prudente ni creo sea el comportamiento consecuente con el ideario del partido.