Ella ya sabía que su sospecha iba a ser confirmada, pero ya tenía todo planeado para vengarse.
Y es que la joven mujer esperó a la salida del motel a que su esposo saliera con la amante para lanzarse a la moto en que se desplazaban y darle, sobre todo a ella, su merecido.
Tras ejecutar su temeraria acción, el hombre no hizo nada para separarlas pero sí esperó a que el conflicto terminara para recoger a su amante y llevarla lejos del sitio.