Una joven de 15 años, aprovechó que estaba sola en la casa y se fue a curiosear a la habitación de sus papás.
Al encontrarse varios videos viejos escondidos en el armario, pensó que se trataba de una colección porno y decidió poner uno de los filmes, que no contenía ninguna etiqueta.
Todo iba bien, hasta que se dio cuenta que los protagonistas del filme sexual eran sus papás.
Se remontaba a la década de los 90 y la chica, contó su experiencia de manera anónima en el sitio Mamamia.
Pero lo peor fue que, usó el contenido sexual para autocomplacerse y solo hasta el final del video, cuando el hombre se acercó para apagar la cámara, notó que el sillón era el de su casa, la mujer era su mamá y el hombre era su papá.
Tal hecho lo mantuvo callado durante 15 años y ahora, decidió contar su experiencia en las redes.