Un fondo, un sello y un premio incentivarán la reconciliación en Colombia

La plataforma de la sociedad civil colombiana por la reconciliación anunció hoy la puesta en marcha de un fondo para financiar proyectos, un sello que identificará a las empresas comprometidas y un premio que destacará los líderes regionales con las mejores iniciativas de cara al postconflicto.

Humberto de la Calle (d), el comisionado de paz, Sergio Jaramillo (i), en La Habana (Cuba). EFE

Estas tres herramientas fueron presentadas en un encuentro en Bogotá de la plataforma Reconciliación Colombia, en el que se repasó el trabajo que en los últimos cuatro meses ha permitido identificar los proyectos que distintas comunidades han desarrollado en todo el país para favorecer la convivencia.

Alrededor de dos centenares de personas se reunieron en un hotel de Bogotá para pasar a la segunda fase del esfuerzo de Reconciliación Colombia, iniciativa en la que participan varias ONG, organismos del Gobierno, empresas y medios de comunicación.

Uno de los socios de la consultora BSD Consulting, Felipe Arango, presentó el fondo para la reconciliación como el instrumento que permitirá «pasar a la acción», y explicó que estará dividido en dos partes: una que apoyará a las comunidades y otro de inversión para respaldar iniciativas empresariales.

La fundación Colombia Líder premiará a los gobernantes locales que promuevan en sus comunidades el retorno de desplazados, construcción de memoria y otras iniciativas por la convivencia, mientras que la ONU otorgará un sello a las empresas que promuevan la reconciliación contratando a víctimas y excombatientes.

El vicepresidente de Colombia, Angelino Garzón, ratificó su compromiso con este proyecto y se ofreció para ayudar una vez que termine su periodo en el cargo, cuando el 7 de agosto próximo tomen posesión el presidente y vicepresidentes elegidos en los comicios del próximo 25 de mayo o del 15 de junio, si hay segunda vuelta.

Garzón recordó que hace 14 años su hija Jenny murió en extrañas circunstancias que aún no se han esclarecido, y argumentó desde la experiencia que «con odio no vamos a revivir a los muertos», sino que hay que dialogar con todos los victimarios si se quiere seguir «el camino para el presente y para el futuro de Colombia».

«Colombia es un país intolerante y discriminador y yo creo que si algo tenemos que hacer es desarmar a la palabra y que haya más inclusión social», agregó el vicepresidente, quien rechazó de nuevo que ninguno de los candidatos presidenciales haya puesto a los derechos humanos como eje de su propuesta electoral.

Por su parte, el gobernador del Meta, Alan Jara, quien estuvo más de siete años secuestrado por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), dijo en declaraciones a Efe que el gran valor de esta iniciativa es que deja claro que «la reconciliación no es sólo un tema de gobierno y guerrilla, sino de toda la sociedad».

«El perdón es muy difícil porque hay mucho dolor y heridas sin sanar», reconoció al plantear que el punto de partida debe ser un trabajo encaminado a cambiar las condiciones para que, en su caso el secuestro, «no le vuelva a pasar a nadie».