Fue tan discreto el partido del Deportivo Independiente Medellín frente a Leones Fútbol club correspondiente a la novena fecha de la Liga Águila de este segundo semestre del año, que muchos poderosos seguidores empezaron a justificar el juego de su equipo a través de las cábalas que son tan populares en este deporte.

Personalmente no creo en las presunciones y los pobres resultados de los últimos partidos los veo más a las nefastas consecuencias de una dirigencia encabezada por el embeleco de don Raúl que ha permitido no solo la salida de jugadores claves del ´Decano’, sino a la moderada contratación que se presentó en este torneo.

Quizás muchos poderosos seguidores que hacen un esfuerzo especial para acompañar a su equipo en la parte económica, creen que los resultados se deben a situaciones ajenas al fútbol, por lo tal toman las cábalas como esa justificación para tratar de entender las causas por las cuales el Medellín que ha tenido buenas presentaciones, viene de más a menos.

El mismo “Rey de Corazones” tiene su cábala y por ello utiliza el camerino antiguo y no el nuevo que se construyó cuando se remodeló el Atanasio Girardot. En la segunda dirección técnica de Leonel Álvarez, optó por utilizar éste sitio por agüero, y desde ese momento el Medellín lo mantiene.

Otra cábala que he escuchado, es el de un hincha poderoso que ha venido siguiendo partido tras partido al ´Decano´ desde hace más de 20 años y es una que indica que cuando el Medellín empieza de local un partido atacando de sur a norte, pierde o tiene un discreto encuentro. “rara vez gana” dice Andrés Caleb a quien le he escuchado este agüero desde hace muchos años.

Reitero, no creo en las cábalas. Considero más las situaciones que se exhiben en el campo del juego, que en otras circunstancias, las cuales se evidencia a la luz del hincha y es precisamente el pobrísimo nivel que vienen presentando muchos jugadores.

Ya la poderosa hinchada se inquietó, los cánticos y las rechiflas se empezaron a escuchar en el partido contra Leones y esto no es una cábala, es la realidad que está presentando en estos momentos el Medellín.

A la salida del estadio escuché a una joven hincha del “Poderoso” que portaba una de las nuevas ‘sagradas’ del equipo, decir lo siguiente: “Tengo la camisa negra y con ella hemos perdido dos partidos, ojalá no juegue contra el Tolima de visitante con la misma”.

No, no creo en las cábalas, creo y confío más en la meritocracia de Zambrano y en su experiencia. Espero como hincha poderoso que esto sea tan solo un bache, que se retome el rumbo, lograr un triunfo en el próximo partido ante un difícil rival como lo es el Deportes Tolima aun cuando juguemos con la camisa negra.

@emecorrea

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Redacción Minuto30

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