Se ratificaron y constataron las denuncias del entonces Presidente Uribe.

Dentro de los implicados están magistrados involucrados en esas grabaciones que declararon ilegales ellos mismos.
Se comprueba que muchos fallos son políticos y no en derecho.

Son amañados y acordes con las conveniencias de quienes pagan por ellos.

La Justicia se le aplica a los de ruana, los demás la compran.

Las consecuencias están por verse pero los abogados de los condenados y aún de los absueltos, deben estar relamiéndose la boca por la gran cantidad de trabajo que les ha caído, ante las posibilidades de nulidad y reapertura de las investigaciones que se derivan de esta avalancha de hechos que demuestran lo que Uribe denunció en su momento y por lo cual lo han perseguido a él y a sus funcionarios con saña inexplicable; hasta ahora que se descubrió la punta del iceberg con la implicación en corrupción de tres de sus más ahincados acechadores e insidiosos “jueces”.

Muy seguramente en el transcurso de las investigaciones caerán otros implicados en ese tinglado de corrupción y dentro de ellos podrán estar esos que en su momento consideraron que las decisiones en esas cortes deberían ser políticas en vez de justas.

Triste que tengan que ser entidades extranjeras las que nos demuestren lo podrida que está nuestra rama judicial, pero el hecho es que de no suceder lo de esta semana, muy posiblemente en muy poco tiempo estaríamos ante una catástrofe gigantesca debido al grado superlativo de corrupción y de injusticia galopante. Afortunadamente nos llegó del norte esas pruebas fehacientes del estado de cosas y podemos, si en verdad queremos, salir de esta olla maloliente y contagiosa.

Ahora “la Cosa Juzgada” desaparecerá para todos los fallos en donde estos y los otros implicados que aparecerán muy pronto, en esa mafia de corrupción de la aplicación de la justicia y obligará a realizar o a reabrir las investigaciones y redefinir la situación de condenados y absueltos. Soy ignaro en derecho y por eso asumo que ni para los absueltos servirá el principio de favorabilidad. Es que no hubo juicio válido y las sentencias serán nulas. ¿Cabrán aquí los fallos de casación?

Grave y mucho para quienes acudieron sin conocimiento real, a los abogados pertenecientes a estas mafias o camarillas puesto que con base en los éxitos obtenidos y sabedores de que el contrato en estas materias es de medios más no de resultados, muy posiblemente se vieron motivados a contratarlos.

Esos delincuentes dentro de sus honorarios incluían el costo del soborno y no creo que se lo dijeran a sus representados. En definitiva el cohecho se materializaba sin el conocimiento real del cliente y de ahí que pueden ser injustas las implicaciones que se les quieren dar a los representados por el ahora encarcelado fiscal anticorrupción. Será la palabra del abogado en contra de la de su representado.

Parece que los tentáculos de este fenómeno indescriptible se extendieron demasiado; alcanzan sinnúmero de individuos e instancias y, como siempre ha sucedido, llegaremos al “DEJE ASÍ” para suspender las investigaciones y no ahondar en ese lodazal en el que está el Estado colombiano en todas sus ramas del poder público. Aquí no se salva nadie.

Ejecutivo, legislativo, judicial, investigativo y todas las IAS están en ese espeso y maloliente caldo de cultivo de pobreza e inequidad.

El cataclismo es generalizado y parece que ni nos hemos dado por notificados o, como dice el Espurio: “Me acabo de enterar”

Postre: Se destruyó la Aplicación de la Justicia y seguimos como si nada. En otro país el cambio de gobierno sería inmediato.

Author Signature
Redacción Minuto30

Lo que leas hoy en Minuto30... Mañana será noticia.

  • Compartir:
  • Comentarios

  • Anuncio

    Acceder a subsidios VIS por más de 108 millones, las familias antioqueñas pueden hacerlo