Nueva huelga de vigilantes del aeropuerto de Barcelona desde el 6 de octubre

El asesor del comité de huelga de los trabajadores de Eulen en los controles del aeropuerto de Barcelona-El Prat, Juan Carlos Giménez (i), acompañado de trabajadores de Eulen, a su llegada a la asamblea para analizar el laudo obligatorio. EFE

Los vigilantes del control de seguridad del aeropuerto español de Barcelona acordaron hoy una nueva huelga desde el 6 de octubre, después de que el jueves pasado se conociera el laudo arbitral sobre el conflicto laboral de estos empleados, que había causado grandes aglomeraciones de viajeros.

Los trabajadores argumentaron hoy que el motivo de la huelga es exigir a la empresa Eulen que cumpla con el laudo obligatorio.

El asesor del comité de huelga, Juan Carlos Giménez, subrayó a la prensa que esto no significa que los vigilantes privados vean con buenos ojos el laudo, ya que la asamblea de trabajadores rechazó hoy su contenido.

Giménez argumentó que, pese a lo que se dicta en él, no hay suficientes refuerzos de personal para garantizar que los trabajadores puedan parar para ir al lavabo o a comer las veces que sería necesario.

Además, se refirió a la «presión» que reciben los vigilantes por parte de los jefes intermedios de Eulen en el aeropuerto, que utilizan a la Guardia Civil (cuerpo de seguridad del Estado) para ejercer un mayor control sobre los trabajadores, según aseguró.

Los vigilantes desconvocarán mañana la huelga anunciada anteriormente para el viernes que viene, y la nueva convocatoria se formalizará en los próximos días.

Los trabajadores de los controles de seguridad habían iniciado el 14 de agosto una huelga indefinida en demanda de mejoras salariales y más personal tras varias jornadas de paros parciales que causaron grandes aglomeraciones y largas esperas en el aeropuerto.

El día 16, el Gobierno español decidió que un laudo de cumplimiento obligatorio para los trabajadores y la empresa sirviera para solucionar la huelga.

El día 17, los trabajadores suspendieron la huelga temporalmente a causa de los atentados yihadistas de Barcelona y Cambrils. EFE